Londres. Una impresionante exhibición de olfato goleador de Erling Haaland, autor de cinco goles en una hora de juego, sirvió al Manchester City para aniquilar 7-0 al Leipzig y avanzar a los cuartos de final de la Liga de Campeones, donde el Inter de Milán también se instaló en la siguiente etapa.
El 1-1 de la ida en Alemania abría la puerta a un duelo emocionante en el Etihad Stadium. Pero Haaland se encargó rápido de matar cualquier intriga (22, 24, 45, 53 y 58 minutos). La fiesta la completaron el capitán local Ilkay Gundogan (49) y el belga Kevin de Bruyne (90).
“Ha sido un partido fantástico, es la única manera de describirlo. Es el mejor encuentro que he jugado nunca a este nivel, pero una vez ya marqué nueve en un duelo”, declaró Haaland, en referencia al choque del Mundial Sub-20 contra Honduras en 2019.
“Es un tipo increíble, un talento enorme. Potencia, mentalidad, es un ganador”, destacó ayer Pep Guardiola, entrenador de los Citizens.
Con su triunfo, el City regresa al top-8 europeo en su empeño por lograr su primera Orejona, mientras el Leipzig fue eliminado.
A sus 22 años, el ex futbolista del Borussia Dortmund revienta récords de precocidad. Con 34 goles en 25 apariciones en Champions, ya es el futbolista más joven en rebasar los 30, superando a Lionel Messi, quien los consiguió con 23 años.
Sólo dos jugadores habían marcado antes cinco goles en un duelo de la Liga de Campeones, el brasileño Luiz Adriano con el Shakhtar al Bate Borisov en 2014 y Messi con el Barcelona al Leverkusen en 2012.
Con su impresionante actuación Haaland se situó al frente de los goleadores de la presente Champions. Suma 10 tantos, seguido por el egipcio Mohamed Salah (8), del Liverpool.
Con media hora por jugar, Guardiola sustituyó a Haaland por Julián Álvarez, por lo que el noruego se quedó sin la posibilidad de convertirse en el primer futbolista que anota seis tantos en un partido del torneo europeo.
En el otro campo de batalla, el Inter de Milán selló su pase después de lograr un meritorio empate (0-0) ante el Porto en O Dragao, gracias al resultado positivo (1-0) obtenido en el Giuseppe Meazza en la ida.
El cuadro portugués dominó todo el partido y contó con varias ocasiones para al menos haber llevado a la prórroga la eliminatoria, pero los italianos defendieron bien para asegurarse el billete entre los ocho mejores equipos del continente.