México camina de forma “contundente” con el actual gobierno. Por lo que resta de la administración se debe esperar lo que se ha vivido en los pasados cuatro años: una consistencia de mensajes y de políticas públicas, plantea Eduardo Osuna Osuna, vicepresidente y director general de BBVA, el banco de mayor presencia en el país.
Afirma que al banco, en lo que va de la gestión del presidente Andrés Manuel López Obrador, le ha ido mejor de lo esperado, y con las actuales condiciones sociales, políticas y económicas han decidido invertir y lo seguirán haciendo.
Detalla que el país está ante una oportunidad grande de incrementar el potencial de crecimiento de la economía, pero hay temas pendientes por resolver, como la infraestructura, la educación, la inseguridad y la energía, este último, uno de los que más pondera un inversionista a la hora de venir.
Al empresario extranjero se le nota entusiasmo por llegar a México, ejemplo de ello, la inversión anunciada por Tesla, una firma que no llegó al país “sólo porque le caemos bien”.
En entrevista, antes de la 86 Convención Bancaria, que se realizará este 16 y 17 de marzo en Mérida, Yucatán, el banquero señala que el inicio de año ha sido mejor a lo observado en 2021, el año del rebote tras la pandemia, y parte del crecimiento de 3 por ciento que se tuvo en 2022 fue por la solidez y las ganas de prestar de las instituciones de crédito.
–Siempre habla que el crédito es un reflejo de la economía, en lo que va del año ¿cómo ve el banco la situación económica?
–El crédito es un reflejo de lo que pasa en la economía, si hay demanda de crédito es porque hay gente que tiene una necesidad pero también capacidad de pago y nosotros estamos viendo proyectos viables en el caso de los clientes empresariales y pequeñas y medianas empresas.
“El año pasado fue un año extraordinario en ese sentido y también el arranque de 2023 ha sido muy bueno, porque traemos la misma inercia de 2022 en el cierre y porque estamos viendo actividad económica real, en términos de inversiones, consumo.”
–El mundo atraviesa un momento desafiante y de incertidumbre, pero se habla de la mejor posición en la que está México contra países similares o incluso Estados Unidos, ¿ustedes lo ven así?
–Sin duda, cuando uno compara a México con países similares emergentes, estamos mejor posicionados en diferentes temas: la situación de la deuda con respecto del PIB, la situación geográfica, los tratados de libre comercio.
–¿Ese potencial de inversión se está materializando o falta algo?
–Se está materializando, es una realidad, es algo que viene de meses o años y tiene una lógica desde que se vio la disrupción de las cadenas globales, si uno va a al norte del país o a las zonas manufactureras del centro o la región del Bajío, lo que estás viendo es un nivel de demanda de plantas industriales o empresas que llegan, empresas nuevas o la mayoría son empresas que ya estaban en México.
“Es una realidad y ahí vemos estas ventajas competitivas tan claras, pero también hay cosas que deberíamos de hacer mejor para que esto se potencie más.”
–¿Como cuáles?
–Hay cosas tan básicas como los mensajes de estado de derecho, el respeto a las reglas de los tratados de comercio, la generación de energía, que debe ser a costos eficientes, que sea limpia y que garantice la disponibilidad. Hay cosas de infraestructura logística que hoy ya empiezan a ser críticos, algunas carreteras que están saturadas, algunos puertos… Hay que resolverlo, si no se resuelve, pues vamos a tener un cuello de botella que inhibiría las inversiones en México.
–¿Quién no lo resuelve? ¿El gobierno, la iniciativa privada o ambos?
–Es una responsabilidad no solamente de uno, es de los tres niveles de gobierno, porque hay cosas que ocurren a nivel nacional, estatal y municipal, hay cosas que la iniciativa privada también juega en esto.
“Hay un problema de la capacidad de inversión de infraestructura pública, y hay un proceso de coordinación con la iniciativa privada que también se tiene que dar.”
–¿Sería este el punto de quiebre para que el potencial de inversión detone y el crecimiento sea mayor?
–Son varias cosas, pero esto nos condicionará el crecimiento futuro, de corto plazo el tema energético, los paneles del tratado se deben resolver lo más pronto posible, porque al final son mensajes de que las reglas del juego funcionan.
“Hay asuntos que debemos poner en la mesa, que son de seguridad física que hay que resolver, que al final son mensajes de que este es un país confiable, que la gente puede vivir aquí, resolviendo todos estos temas que, además, no son nuevos, son conocidos, potencian la capacidad de atracción de inversiones sin lugar a dudas.”
–También ha hablado de lo heterogéneo que es México, el discurso sobre el potencial es bueno, pero en la calle las preocupaciones son diferentes para las personas, ¿ustedes cómo ven esa situación? ¿A dónde se inclina una balanza?
–Más que ponerlo en una balanza, se debe entender lo heterogéneo que es México, tiene muchas realidades, geográficas por la industria, por demografía, y ese entendimiento de lo heterogéneo es lo que nos puede ayudar a poner soluciones mucho más contundentes de los que no tienen acceso a este potencial de crecimiento.
“Hay zonas que debemos desarrollar, las que no han podido traer más inversión, nacional y foránea.”
–¿Qué se necesita para que México sea más parejo?
–Hay zonas en las que se requieren políticas públicas más agresivas para atraer inversión y también los temas educativos, la gente tiene acceso a mejores trabajos cuando está mejor educada y entonces hay zonas en el país que no han logrado traer suficiente inversión, a veces porque no tienes la logística o porque la geografía no lo permite, eso hay que resolver.
“También detonar desarrollos regionales donde vemos que faltan oportunidades de inversión, pero no es algo nuevo, es un asunto sobrediagnosticado.”
–Al ser el banco de mayor presencia en el país y a falta de dos años que termine el periodo del actual gobierno, ¿cómo se califica la gestión del Estado y qué esperar por lo que resta?
–Como cualquier gestión tiene cosas buenas y cosas malas, pero lo más importante que vemos es que el país sigue caminando de forma contundente, aprovechando algunas oportunidades que están llegando y creo que lo debemos esperar por el resto es lo que vimos para atrás, tuvimos cuatro años de una consistencia de mensajes y políticas públicas que es lo que debemos esperar y con eso estamos operando y decidimos invertir en México, decidimos crecer el crédito, atendemos muchos clientes.
Inversión récord
–¿Digamos que no les asusta?
–Estamos invirtiendo cifras récord año con año, vamos a cumplir el plan de inversión que tenemos para esta administración, de hecho vamos a exceder ese monto de inversión porque no tiene nada que ver si somos más optimistas o evaluamos mejor al gobierno, sino porque crecemos el número de clientes, crecemos el crédito, mejoramos algunos servicios que se nos han quedado cortos por la transaccionalidad, invertimos en tecnología nueva, infraestructura en entidades donde vemos que hay crecimiento y no había suficiente presencia.
“Estamos viendo que tenemos que acelerar proyectos, porque nos ha ido mejor de lo que esperábamos desde todo en el punto de vista de clientes, velocidad de crecimientos de otros productos y la digitalización que ha cambiado dramáticamente el tema en la banca.”
–¿El inversionista está entusiasmado de venir a México?
–Sin duda, estamos viendo el nearshoring, hablamos de eso, pero es, otra vez, un tema de comparables, ¿qué opciones hay para invertir y el mejor lugar para invertir? Tesla no vino a México porque le caemos bien.
–Pasando a temas meramente bancarios, 2022 fue un año récord en ganancias y en colocación de crédito ¿nos puede explicar a qué se debió esto?
–Primero hay que relacionarlo con el crecimiento de la actividad bancaria, hubo un crecimiento muy importante en términos de cartera, nosotros crecimos 15 por ciento el portafolio de crédito, estamos llegando a 1.5 billones de pesos de cartera total, 200 mil millones de pesos de crecimiento en el balance, es muchísimo dinero.
“Estamos viendo los efectos de la digitalización en nuestros costos unitarios. Se habla de la subida de tasas, claro que ayuda, en la banca una subida te ayuda y al igual te puede ser negativo, habrá una bajada de tasas y nos va a retraer parte del ingreso, pero hay que decir que las mayores tasas te quitan demanda crediticia y te aumentan la morosidad que es lo que esperamos.
“Es una buena noticia que a la banca le ha ido bien… Hay que darle el enfoque positivo que la banca hace lo que le toca, que es ser parte del motor económico, ese 3 por ciento del crecimiento hay un componente derivado que la banca estuvo prestando.”
–Entonces, en adelante, como pinta la cosa ¿cuándo veremos la menor demanda de crédito y mayor morosidad? ¿Ya les está afectando?
–Es un proceso gradual que iremos viendo y que es parte de los escenarios que hemos ido proyectando y que va a ocurrir.