En el Mundial Qatar 2022 se intentó prohibir el uso de las máscaras de lucha libre en los estadios. Las autoridades mexicanas informaron que llevaban algunas de luchadores para animar los encuentros y que intentarían preguntar si se podían usar.
Pero el comité organizador de esa competencia fue tajante: “Las máscaras faciales completas, como las famosas de lucha libre mexicanas, tendrían que quitarse al ingresar a un estadio, por razones de seguridad”.
Sin embargo, durante los tres partidos en los que jugó la selección mexicana, los aficionados se las ingeniaron para usarlas y se pudieron apreciar muchas de ellas, desde la clásica de Huracán Ramírez hasta la de Místico.
En Qatar, finalmente no prohibieron a los fanáticos mexicanos usar sus máscaras de luchadores en ninguno de los estadios de la Copa del Mundo o en otros lugares de ese país.
La tradición de los aficionados en los estadios de futbol de portar esas prendas se impuso. Es una práctica ya extendida cada vez que juega la Selección Mexicana.
En los encuentros internacionales es común ver a los seguidores del Tri usar máscaras de Blue Demon, Dos Caras, Santo o de cualquier otro luchador mexicano; además, muchos clubes de futbol mexicano las han plasmado en sus uniformes en diferentes momentos de su historia.