Ginebra. Representantes del gobierno yemení y de los rebeldes hutíes iniciaron ayer en Ginebra, Suiza, conversaciones sobre un intercambio de prisioneros, al tiempo que la Organización de Naciones Unidas (ONU) los instó a entablar conversaciones “serias” para concluir con la guerra civil iniciada desde 2015.
La apertura de estos contactos, que deberán durar 11 días, tiene lugar al día siguiente del anuncio del restablecimiento de las relaciones diplomáticas entre Arabia Saudita, que apoya al gobierno en su guerra contra los hutíes, e Irán, que respalda a estos rebeldes. La ciudad suiza acoge el séptimo encuentro de la comisión bilateral encargada de supervisar la evolución del Acuerdo para el Intercambio de Detenidos, firmado entre ambas partes en 2018 bajo los auspicios de Naciones Unidas.
A la reunión acudirán el enviado especial de la ONU para Yemen, Hans Grundberg, así como responsables del Comité Internacional de la Cruz Roja, garantes del acuerdo.
“Espero que las partes estén listas para implicarse en conversaciones serias para acordar la liberación del mayor número de detenidos posibles”, comentó Grundberg en un comunicado. “Al acercarse el Ramadán, exhorto a las partes a respetar los compromisos que han contraído, no sólo entre sí, sino también con los miles de familias yemeníes que llevan demasiado tiempo esperando reunirse con sus seres queridos”, expresó.
Es la séptima reunión destinada a aplicar un acuerdo sobre el intercambio de prisioneros firmado en Estocolmo hace cinco años, detalló la ONU. Esta última reunión se produce casi un año después de que los insurgentes anunciaran un acuerdo para un canje de prisioneros de mil 400 rebeldes por 823 combatientes progubernamentales.