París. Mientras miles de franceses se manifestaban en las calles, el Senado de ese país aprobó ayer la polémica reforma a las pensiones impulsada por el presidente Emmanuel Macron. “Se dio un paso importante”, declaró la primera ministra Elisabeth Borne, después de que 195 senadores votaran a favor y 112 en contra. “A pesar de los intentos de obstrucción por parte de ciertos grupos, el debate democrático se llevó a cabo”.
Las protestas ante la reforma reunieron a 368 mil franceses, 48 mil de ellos en París, según datos del Ministerio del Interior. Sin embargo, el sindicato CGT cifró en más de un millón los manifestantes, 300 mil en la capital. Según distintos sondeos, dos de cada tres franceses se oponen al plan del Ejecutivo de retrasar la edad de jubilación de 62 a 64 años para 2030 y de adelantar a 2027 la exigencia de cotizar 43 años (y no 42 como hasta ahora) para cobrar una pensión completa.
El rechazo se plasmó principalmente en las protestas, pero también en huelgas en los transportes y en el sector energético.
A lo largo de esta semana la tensión sobre la reforma alcanzó su máximo nivel tras la negativa del presidente Macron para reunirse con los sindicatos.
“Cuando hay millones de personas en las calles, cuando hay huelgas y todo lo que obtenemos de la otra parte es silencio, la gente se pregunta: ¿Qué más tenemos que hacer para que se nos escuche?”, dijo Philippe Martinez, líder del sindicato CGT, quien recalcó la exigencia de un referéndum sobre la reforma.
“Ya que está tan seguro de si mismo, el presidente de la República, debería de consultar al pueblo. Veremos cuál es la respuesta.”
Ahora que el Senado aprobó el proyecto de ley, será revisado por un comité conjunto de legisladores de ambas cámaras, probablemente el miércoles. Si la comisión llega a un acuerdo sobre el texto, es probable que el jueves se celebre una votación final. Sin embargo el resultado parece incierto en la Asamblea Nacional, donde el partido de Macron necesita los votos de sus aliados para obtener la mayoría.
Por su parte, los sindicatos tienen prevista una nueva jornada de huelgas y protestas en todo el país el próximo miércoles.