Ciudad de México. Este viernes se fueron a paro todos los planteles de la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM), en solidaridad con una estudiante de la unidad Cuajimalpa que ayer denunció haber sido víctima de una agresión sexual, sin que las autoridades sancionaran al presunto responsable del ataque, a pesar de que éste habría admitido su responsabilidad en los hechos.
Como informó La Jornada desde ayer en su edición online, una alumna de la licenciatura de Derecho del campus Cuajimalpa –cuyos compañeros pidieron identificar sólo como Karen “N”—señaló a través de un video que había sido atacada sexualmente en diciembre del año pasado por un compañero suyo.
“A mí mi ex pareja, que va en mi salón de clases y se llama Naoki, me violó el 19 de diciembre de 2022. Yo no fui al Ministerio Público porque me dijeron que la UAM tenía un proceso súper amigable, que lo más probable era que lo expulsaran y yo lo único que quería era ya no verlo”, detalló la joven.
Tras la denuncia, ayer mismo el asamblea estudiantil del campus Cuajimalpa determinó realizar un paro de labores por tiempo indefinido y le dio a conocer a las autoridades un pliego petitorio en el cual exigieron que se reconsidere el dictamen del Consejo Divisional de Ciencias Sociales y Humanidades sobre el caso, así como la renuncia de la titular de ese organismo, Esther Morales Franco, por su “actitud sistemática con respecto a este y otros casos anteriores que se han suscitado en la Unidad”.
Luego de que se diera a conocer el casi, este viernes iniciaron paros académicos en los planteles Iztapalapa, Lerma, Azcapotzalco y Xochimilco, en solidaridad con la estudiante agredida.
En grupos de mensajería instantánea, estudiantes de diversos planteles convocaron a hacer una colecta de víveres para quienes participen en la toma de las instalaciones, así como a organizar las guardias que resguardarán los campus mientras dure la protesta.
UAM reconoce no estar exenta de violencia de género
Fuentes de comunicación de la UAM le confirmaron a este diario que todas las unidades de la Universidad fueron tomadas y que las autoridades de esta casa de estudios ya iniciaron un proceso de diálogo con los alumnos inconformes, en espera de que se dé a conocer un pliego petitorio general.
Poco más tarde, la institución emitió un comunicado en el cual “reconoce que los espacios universitarios no se encuentran libres de expresiones relacionadas con la violencia por razones de género, hechos que lastiman la vida académica y deterioran el tejido social”.
Ante las protestas en todas sus unidades, la UAM subrayó que “es una institución abierta, plural y sensible ante las diferentes exigencias y problemáticas que enfrenta su comunidad”, por lo que “frente a las denuncias de violencia de género en la Unidad Cuajimalpa, que han motivado los cierres de las demás Unidades, se ha establecido comunicación con las personas afectadas, a fin de atender cualquier forma de agresión personal o institucional”.
En ese mismo tono, indicó que el Colegio Académico “se comprometió a analizar y fortalecer el Reglamento del Alumnado y los protocolos de atención a víctimas, con acciones contra la violencia por razones de género”.
Para construir una “Cultura de Paz, hacemos un llamado para aplicar en todas las áreas de la UAM las Políticas transversales para erradicar la violencia por razones de género, aprobadas en la Sesión 488 del Colegio Académico y el Código de ética de la Casa Abierta al Tiempo, documento fundamental sobre principios y valores esenciales para la convivencia universitaria”.
La Universidad rechazó “categóricamente cualquier expresión de violencia. Exhortamos a toda la comunidad universitaria a contribuir en la construcción de esta Cultura de Paz y que, de manera conjunta, sigamos fortaleciendo los diversos espacios libres de violencia”.