El desenlace del secuestro de cuatro ciudadanos estadunidenses en Tamaulipas no impactará la relación bilateral México-Estados Unidos, consideró el presidente Andrés Manuel López Obrador, pues ambos reconocen la importancia de evitar la violencia en los dos lados de la frontera para garantizar la paz. Destacó que hay acuerdos puntuales, como en el caso del fentanilo, donde ya existe un plan, sobre la base del reconocimiento del alto riesgo que implica su consumo en los jóvenes.
En su conferencia matutina asumió que “nosotros tenemos que terminar la investigación para saber con precisión qué sucedió, informar aquí cuál fue la causa. Ya se está haciendo la investigación, para informar. Y no deja de haber politiquería aquí y allá, ya hemos hablado de eso, pero tenemos que trabajar juntos, respetando nuestras soberanías. Es que antes se metían al país y ellos decidían, por eso hasta me extraña, cómo es que no supieron lo de García Luna, si trabajaban juntos”.
López Obrador condenó la reacción de políticos y funcionarios de Estados Unidos en torno al fentanilo, pues si bien está claro que hace mucho daño, “es terrible, ¿cómo es que llega (a Estados Unidos)?, ¿cómo se distribuye allá? Va a servir para darle una sacudida a las agencias, qué están haciendo. Mínimo hay ineficiencia, porque no se puede ser candil de la calle y oscuridad en la casa, o nada más estar viendo la paja en el ojo ajeno y no la viga en el propio”.
Consideró que hubo una buena actuación de los cuerpos de seguridad porque encontraron rápidamente a las personas secuestradas aunque lamentablemente hubo fallecidos.
López Obrador consideró que en la cooperación bilateral existe una buena relación, “entiendo que ellos están preocupados, muy preocupados, porque son muchos los jóvenes que pierden la vida en Estados Unidos por el consumo de fentanilo, miles. Nosotros estamos cooperando y lo vamos a seguir haciendo, pero también estamos haciendo propuestas de que se atienda a los jóvenes, que se les brinde información suficiente a los afectados y a sus papás sobre el daño del fentanilo”.
Vinculó el caso al juicio de Genaro García Luna insistiendo en la relevancia que tendría para ambos países que éste declarara sobre sus vínculos con los ex presidentes Vicente Fox y Felipe Calderón; que explicara cómo fue escalando en la estructura de seguridad pública y mencionara sus relaciones con las agencias estadunidenses.
En tanto, Melissa G. Dalton, subsecretaria para la Defensa Nacional y Asuntos Hemisféricos, afirmó que el uso de las fuerzas armadas estadunidenses contra cárteles que trafican fentanilo podría tener consecuencias para la cooperación con México.