La solidez que ha tenido la economía mexicana en los últimos meses le ha dado una buena percepción ante inversionistas mundiales y ello ha permitido que el país no se vea castigado con una salida de capitales, planteó Nicolás Echeverry, economista para Latinoamérica de la firma ISI Emerging Markets Group.
En una videoconferencia, organizada por la Escuela Bancaria y Comercial, el experto planteó que, comparado con otras naciones similares, México es una nación en la que los inversionistas perciben un bajo nivel de riesgo, debido a la solidez de los indicadores macroeconómicos.
Precisó que la buena dinámica que se observa de la actividad económica en el país también ha sido uno de los factores para que el consumo de la población siga al alza y dicho indicador también se ha visto beneficiado por el ingreso de las remesas que los connacionales envían a sus familias.
No obstante, indicó Echeverry la incertidumbre que se tiene en el mundo por una posible recesión y la inflación que aún persiste en Estados Unidos provocarán en un momento del año que los migrantes mexicanos disminuyan los montos de remesas que envían, motivo por el cual el consumo podría ralentizarse en los siguientes meses.
Pese a lo anterior, el economista señaló que el panorama que se tiene para 2023 de la economía mexicana es alentador, y luego de la crisis, el país cuenta con los fundamentales necesarios para no caer en una situación complicada.