El salón de plenos de la Cámara de Diputados lució ayer otra vez lleno, como antes de la pandemia, con 508 de 531 aspirantes a relevar a cuatro consejeros del Instituto Nacional Electoral (INE), quienes presentaron un examen de conocimientos con 80 preguntas de opción múltiple en una tableta electrónica.
Acudieron servidores públicos, magistrados, consejeros estatales y otros que ya ocuparon esos cargos, académicos y ciudadanos sin nexos partidistas.
Entre los asistentes estuvo Roberto Cardiel Soto, encargado de la secretaría ejecutiva del INE –en sustitución de Edmundo Jacobo–, único contendiente que integra la Junta General Ejecutiva encabezada por Lorenzo Córdova.
Para el examen, que abarcó las áreas constitucional, gubernamental, electoral y de derechos humanos, también llegaron Bertha Alcalde Luján, titular de Operación Sanitaria de la Cofepris, y la directora del Instituto Nacional para la Educación de los Adultos, Teresa Guadalupe Reyes Sahagún.
Llamaron la atención el maestro de primaria en Nayarit Óscar Bautista Muñoz, ataviado con vestimenta wixárika; la triatleta María del Carmen López Martín, quien con zapatillas en mano corrió descalza dentro del recinto parlamentario por su credencial de elector, requisito indispensable para presentar la prueba, y Jesús Ociel Baena, magistrado no binario del tribunal Electoral de Aguascalientes. Baena, quien en su momento impugnó la convocatoria porque sólo contenía una lista para hombres y otra para mujeres, refrendó ayer su queja porque eso persistió.
La prueba no empezó a las 11 de la mañana –como estaba previsto– por problemas técnicos, como saturación y no reconocimiento de letras como la “ñ” en algunos apellidos.
Jesús González Muñoz –el primero en finalizar– sostuvo que el retraso sólo fue cuestión de minutos, aunque los últimos en salir del pleno lo hicieron pasadas las 14:30 horas, cuando debió concluir a la una de la tarde.
Entre los postulantes fue bien recibida la propuesta de que una mujer sea la próxima consejera presidenta del INE. Gabriela Villafuerte Coello, magistrada de la sala regional especializada del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación, destacó que “la sala superior emitió una sentencia” en ese sentido.