En una sesión hasta la que llegaba la estridencia de un grupo de mariachis, conformados exclusivamente por mujeres o la música de danzón que resonaba en otro evento, senadoras de Morena se confrontaron con legis-ladoras de oposición que acusaron al presidente Andrés Manuel López Obrador de ejercer “violencia de género” en contra de la titular de la Suprema Corte, Norma Piña.
El pleno discutió un paquete de reformas para frenar la violencia en contra de las mujeres y en tribuna la panista Xóchitl Gálvez formulaba un reconocimiento a las artesanas indígenas que bordan huipiles cuando la senadora del PRI Beatriz Paredes pidió formular una pregunta, pero lo que hizo fue leer completo un desplegado en el que un grupo de “destacadas” mujeres, dijo, exigen “ponerle fin a la violencia por razones de género contra la presidenta de la Suprema Corte”.
Paredes leyó de prisa: “Apenas con dos meses de haber asumido el cargo, se le han formulado acusaciones inverosímiles, lo que nos hace concluir que se le juzga por ser mujer y ser independiente”.
De inmediato, asumieron tales acusaciones la senadora Gálvez y la también blanquiazul Josefina Vázquez Mota, quien resaltó que “ninguna mujer debe ser sujeta a juicio cotidiano y a descalificaciones, oprobios y ataques, que resultan inaceptables”.
Trato recíproco
La senadora de Morena Malú Mícher, presidenta de la Comisión para la Igualdad de Género, rechazó tales imputaciones y les recordó el desplante de la ministra Piña al Ejecutivo federal al no levantarse durante el acto conmemorativo de la Constitución, el 5 de febrero en Querétaro. Además, les dijo que deberían preocuparse más por el hecho de que jueces y magistrados no estén juzgando con perspectiva de género.
“Somos los últimos expedientes y nadie ha levantado la voz para reclamar eso al Poder Judicial.”
La panista Kenia López Rabadán, con la estridencia que la caracteriza, gritó que el presidente López Obrador incita a la violencia contra la ministra Piña “y él será responsable si le pasa algo a ella o a cualquier otras persona del Poder Judicial”.
La respuesta vino de la morenista Imelda Castro, quién llamó mentirosas a priístas y panistas. No es la primera vez, dijo, que el presidente López Obrador cuestiona las resoluciones de los jueces, de un Poder Judicial que debe respetar también al Ejecutivo.
Las opositoras querían seguir ese debate, pero la presidenta en funciones de la mesa directiva, Ana Lilia Rivera, les recordó que estaban en el debate de un dictamen.
Afuera del recinto seguían tocando Las Perlitas Tapatías, agrupación que cumple 34 años como un mariachi conformado sólo por mujeres, con sus distintivos trajes de charro azul celeste, invitadas por la senadora de Movimiento Ciudadano Verónica Delgadillo.
Un piso más arriba se entregó un reconocimiento a la Danzonera Isora Club, primera y única orquesta de este tipo en México integrada sólo por mujeres. Y muchos se soltaron a bailar.