Este jueves, el presidente Andrés Manuel López Obrador recibirá a una delegación de importantes funcionarios estadunidenses en temas de seguridad que estará encabezada por Elizabeth Sherwood-Randall, encargada de la estrategia contra el fentanilo de la Casa Blanca.
Así lo informó el mandatario durante su conferencia matutina de ayer. “Tenemos comunicación permanente”, remarcó al referirse a la relación con la administración de Joe Biden.
La visita de la asesora del Departamento de Seguridad Nacional mañana a Palacio Nacional se da en medio de una crisis de muertes en el país vecino a causa del consumo de fentanilo. De acuerdo con cifras oficiales, 71 mil estadunidenses perdieron la vida en 2021 por sobredosis de ese opioide, considerado 50 veces más potente que la heroína.
En la conferencia presidencial, al presentar el informe quincenal de seguridad, el titular de la Secretaría de la Defensa Nacional, Luis Cresencio Sandoval, informó que del 21 de febrero al 6 de marzo las autoridades decomisaron casi 21 kilos de fentanilo, equivalente a 21 millones de dosis. Agregó que en lo que va del sexenio se han logrado incautar 6 mil 115 kilogramos de esa droga.
Al secretario de la Marina, José Rafael Ojeda, se le preguntó sobre los dos marinos desaparecidos hace un año, y evitó ahondar en detalles: “No les puedo decir cómo vamos, ni nada por el estilo, porque se entorpece la situación”, debido a que la indagatoria la lleva la FGR.
La secretaria de Seguridad y Protección Ciudadana, Rosa Icela Rodríguez, informó que en los últimos 16 días fueron liberadas 288 personas, con lo que ya suman 5 mil 309 gracias al programa para tal fin.
Al preguntarle sobre el caso del médico tradicional peruano Lauro Hinostroza García, detenido en septiembre pasado por autoridades mexicanas por traer consigo ayahuasca, señaló que se trabaja para poder liberarlo.
En Perú la posesión de esta hierba no es ilegal, pero sí en nuestro país, por lo que la actuación de las autoridades fue correcta; ahora se valora reconsiderar su aprehensión.
El presidente López Obrador aprovechó este caso para insistir en la reforma al sistema de justicia. “Un buen Ministerio Público, un buen juez (podrían decir): ‘Si tengo aquí estos elementos, me consta que este señor es un curandero y que no es un delincuente, ¿por qué no lo voy a liberar? Mi trabajo tiene que ver con los papeles y los procedimientos, pero tengo una convicción y lo fundamental es que tengo que ser justo’. Es una cuestión de sentido común”.
Ante una pregunta sobre un informe en salud en México de La Sorbona de París, el mandatario apuntó que si bien es una de las mejores universidades del mundo, “no le creo mucho (…) la política neoliberal afectó mucho el desempeño de las universidades”. Externó en cambio su confianza en sus funcionarios del sector.