Ciudad de México. El sentimiento de los consumidores mexicanos sobre el entorno económico del país mejoró en febrero, pero mantuvo su pesimismo en la economía esperada para su hogar, revelaron datos del Indicador de Confianza del Consumidor (ICC).
Elaborado por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), el Índice de Confianza del Consumidor subió a 44.8 puntos en febrero, desde los 44.3 revisados al alza en el mes anterior, su lectura más alta desde noviembre de 2021.
El ICC registró un aumento mensual de 0.5 puntos en febrero, su sexta alza consecutiva, debido a que cuatro de los cinco componentes que lo integran: sentimiento del presente de la economía en el hogar (0.3 puntos); el ánimo del presente y futuro de la economía del país (1.1 y 0.1 puntos, en ese orden), así como la posibilidad de la compra de muebles, televisores, lavadoras u otros aparatos electrónicos (2.5 puntos), reportaron crecimiento; mientras la situación económica esperada de los miembros del hogar dentro de 12 meses, respecto a la actual descendió 0.9 puntos.
Los datos que arrojó la Encuesta Nacional sobre la Confianza del Consumidor a 2 mil 336 viviendas urbanas a nivel nacional, que elaboran en conjunto el Inegi y el Banco de México (BdeM), reflejaron que en febrero, la confianza del consumidor en México aumentó 1.7 puntos de forma anual.
Al igual que en su comparación anual, el pesimismo de los consumidores se mantuvo en la situación económica del hogar esperada dentro de 12 meses, respecto a la actual, pues fue el único componente que presentó una caída respecto al mismo mes del año anterior, al descender 0.7 puntos; mientras que los otros indicadores mostraron un avance en febrero con respecto al mismo mes de 2022.
Así, la posibilidad para efectuar compras de bienes durables, tales como muebles, televisor, lavadora y otros aparatos electrodomésticos mejoró al subir 2.5 puntos mensual, mientras respecto al mismo mes del año pasado repuntó 4.7.
La situación económica personal esperada dentro de un año y las expectativas de inflación son aspectos que le preocupan al consumidor mexicano. De ahí que la compra de bienes duraderos se mantenga muy por debajo del resto de los principales cinco componentes del ICC.