El impago en 2023 no es un problema que vaya a afectar al sistema bancario, debido a sus altos índices de capitalización y a una buena gestión de riesgos. Las dificultades las atravesarán las instituciones financieras no bancarias como sociedades financieras populares (Sofipos), de objeto múltiple (Sofomes) o cajas populares, afirmaron especialistas.
Lo anterior es resultado de que las no bancarias atienden de forma tradicional al segmento popular, a familias y a empresas de menores ingresos, mismas que han perdido parte de su poder adquisitivo dados los altos niveles de inflación y también debido a que desde la pandemia de covid-19 ya presentaban problemas, aseguraron.
Carlos Serrano, economista en jefe de BBVA México, explicó que las instituciones bancarias no padecerán problemas de morosidad debido a que en el país los salarios en términos reales han aumentado, y hay una mejor cultura de pago de los acreditados.
“En el sector informal hay familias de menores ingresos que están siendo afectadas por la inflación y pierden poder adquisitivo y hay un mayor peligro para entidades financieras no bancarias que son las que atienden este sector”, dijo el economista.
Salarios no causan presiones inflacionarias
Indicó que, si bien, el hecho de que aumenten los salarios al sector formal “es afortunado, porque favorece al consumo y al mercado interno, no creemos que haya causado presiones inflacionarias porque se venía de un nivel salarial bajo”.
Cifras de la Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV) indican que al cierre de 2022 el índice de morosidad del sector bancario, respecto de la cartera de crédito total, se situó en 2.09 por ciento (130 mil 393 millones de pesos). Comparado con 2.05 por ciento reportado al cierre de 2021 existe un marginal incremento de 0.04 puntos porcentuales.
Jorge Tello, director de investigación aplicada de la Fundación de Estudios Financieros (Fundef), indicó que si bien, los bancos han podido sortear los temas relacionados con el impago, las entidades no bancarias han presentado problemas desde la pandemia.
“Algunas instituciones financieras no bancarias han presentado problemas de impago desde la pandemia y ahora se ha incrementado porque sus clientes han perdido poder adquisitivo por la inflación. Así que es probable que puedan resentir el impago durante 2023. Sin embargo, la magnitud de este impacto va a depender de si la inflación se controla y también dependerá del comportamiento que tenga la economía en el año”, mencionó Tello.
Señaló que las Sofipos, Sofomes y cajas populares que estén relacionadas con personas de escasos recursos son las que se verán afectadas “aunque en cada una de las tres hay honrosas excepciones. Pero sí hay empresas que tienen problemas, sobre todo porque van a un segmento que están teniendo impactos negativos en el bolsillo”.