Ciudad de México. El baile volvió a Santa María la Ribera, donde hace una semana fue retirado el Sonido Sincelejo y varias personas resultaron agredidas por empleados de la alcaldía Cuauhtémoc, lo que derivó en una queja ante la Comisión de Derechos Humanos (CDH).
Los vecinos aprovecharon el evento para recolectar firmas a fin de revocar el mandato de la alcaldesa Sandra Cuevas y solicitaron a diputados locales que presenten formalmente la petición de juicio político contra ella por abusos de autoridad y las violaciones a sus derechos humanos.
Otra de sus peticiones es conocer qué motivó a la funcionaria a retirar al sonidero, “que ha estado en este espacio desde hace 12 años, permitiendo que gente de la tercera edad y familias provenientes de diferentes puntos de la ciudad se diviertan sanamente, sin venta de alcohol o drogas, como ella señaló”.
En la fiesta callejera de ayer los asistentes usaron bocinas propias y pusieron música de los teléfonos celulares. Foto Roberto García Ortiz.
Con bocinas traídas de sus casas y el uso de sus datos de celular “para poner la música que nos gusta”, la gente bailó al ritmo de la cumbia, salsa, huaracha y merengue, como Melao, un invidente que desde hace más de una década viene desde Iztapalapa cada domingo.
Armando y Lupita, quienes invierten cuatro horas para llegar a la alameda de Santa María la Ribera desde el estado de México y son considerados “una de las mejores parejas bailadoras”, con sus 66 años asombraron a los concurrentes con sus mejores vueltas.
Ángela, Lupita, Mary y José, entre otros, explicaron que esta “manifestación pacífica es para hacer valer nuestro derecho a bailar, a divertirnos y expresar nuestro apoyo a los integrantes del Sonido Sincelejo, a quienes la gente de la alcaldía les quitaron sus bocinas y hasta una caja con la música que ponían”, las cuales no les han devuelto.
#DíaEnImágenes Decenas de personas acudieron a la Alameda de #SantaMaríaLaRibera, en la @AlcCuauhtemocMx, para participar en la verbena popular en apoyo al #SonideroSincelejo y por el derecho ciudadano al gozo de bailar.https://t.co/rjv2TDjHN4
— La Jornada (@lajornadaonline) February 26, 2023
Fotos: Roberto García Ortiz. pic.twitter.com/EW6XgEfjQX
Con cartulinas donde se leía “¡Sandra Cuevas, déjame bailar!”, “Mi alegría es mía, nadie me la quita”, y “Más baile y menos represión”, los asistentes al tíbiri de cada domingo expresaron su malestar porque “nos quitaron a la mala nuestro espacio”.
Personal de la CDH que se encontraba en el lugar comentó que su presencia se debió a la presentación de una queja por los hechos del 19 de febrero, mientras vecinos recolectaban firmas para “exigir la revocación de mandato de la alcaldesa”.
Francisco Urrutia explicó que las rúbricas, que en una hora sumaban 63, se entregarán al Instituto Electoral de la Ciudad de México para que se proceda en consecuencia, aunque “tengo guardadas otras 720 para que nos devuelvan el espacio, las cuales presentaremos en su momento como vecinos, no como Sonido Sincelejo”.
Otros vecinos consideraron que “la demanda ciudadana tiene que proceder: que regrese el sonido y se proceda por las agresiones que sufrieron la semana pasada, de las cuales algunos fuimos víctimas por parte de gente de la alcaldía Cuauhtémoc por órdenes de su jefa, Sandra Cuevas, para que no vuelvan a suceder”.