La titular de la Secretaría de Economía, Raquel Buenrostro, informó que ha habido avances importantes en las negociaciones en torno a las consultas relacionadas en el seno del tratado comercial de México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC), sobre las diferencias en torno a la política energética de nuestro país. Sostuvo que de los cuatro rubros donde había discrepancias en tres se ha encaminado ya una posible ruta de solución: diésel, permisos en el sector y almacenamiento.
Entrevistada en Palacio Nacional, señaló que sólo faltan mayores acercamientos en cuanto al despacho de la energía eléctrica para alcanzar un acuerdo general. Aunque no definió un plazo preciso, confió en que este año se subsanen las diferencias que surgieron el año pasado y que llevaron a Estados Unidos y Canadá a promover la consulta.
Por otro lado, Buenrostro indicó que ha habido acercamiento con legisladores estadunidenses para explicarles los alcances del decreto presidencial en torno al maíz transgénico, pues en muchos casos, no se acude directamente al documento y se acude a fuentes indirectas. Se les explicó que el presidente Andrés Manuel López Obrador fijó como prioridad la protección de la salud de la población sobre cualquier transacción comercial, pero la decisión no implica ninguna violación a tratados internacionales.
El decreto establece que se puede importar maíz transgénico sólo para uso pecuario e industrial, “porque nosotros no tenemos ahorita la capacidad de producción, tenemos prácticamente que duplicar la producción nacional”. Refirió que este tipo de maíz, que en México se prohíbe para consumo humano, tiene muchos usos comerciales indirectos.
Sobre las presiones estadunidenses para que México adquiera mayores cantidades de maíz señaló que al final de cuentas en materia comercial se debe estar sujeto a la oferta y la demanda.
–¿Lo que no quiere es que se prohíba…no?
–Están preocupados porque, lo decimos claramente y lo ha dicho el Presidente, que lo que quiere es siempre privilegiar la salud de los mexicanos sobre cualquier acto mercantil. Siempre va a ser más importante para nuestro gobierno.
Buenrostro reconoció que este aspecto “les desagrada, porque dicen que implícitamente les decimos que es dañino, pero para eso están los estudios científicos”. Aún faltan algunas consultas con su contraparte estadunidense para acercar posiciones, aunque en materia comercial promover consultas es un proceso común.
En la Organización Mundial del Comercio, donde se encuentran todos los países ha habido más de 400 paneles, “es algo común, pero la verdad es que no hay ninguna violación a tratados internacionales ni afectación comercial”.