En las últimas dos semanas han fallecido 57 migrantes centroamericanos y de otros países de la región por choque o volcadura de autobúses en los que se trasladaban, uno en México, en el estado de Puebla, y otro en Panamá. A ellos se suman los cinco migrantes guatemaltecos cuyos cuerpos fueron encontrados junto con los de nueve personas más dentro de una camioneta hundida en un arroyo en Santa María La Floreña, Nuevo León, el pasado 7 de febrero.
Frente a ello, la Organización Internacional para las Migraciones (OIM) en Centroamérica y Norteamérica aseveró que “es urgente abordar conjuntamente las causas fundamentales de la migración irregular y garantizar que nadie tenga que arriesgar su vida en búsqueda de un futuro mejor”.
A través de redes sociales, insistió en la necesidad de flexibilizar las opciones de migración regular y enfatizó que “poner obstáculos a la migración no la detiene, pero sí la hace más peligrosa y hace más difícil para los países de destino aprovechar el potencial de desarrollo que traen los migrantes”.
El 19 de febrero pasado, 17 personas en contexto de movilidad murieron en un accidente de autobús en la autopista Cuacnopalan-Oaxaca, en Puebla. La mayoría de los pasajeros eran originarios de Colombia, Venezuela, Haití, Honduras y República Dominicana.
En tanto, previamente, el 15 de febrero, en la Ciudad de Panamá 40 personas murieron cuando un autobús que trasladaba migrantes que habían cruzado la selva del Darién, fronteriza con Colombia, chocó con otro vehículo en una carretera. Los pasajeros eran llevados a un albergue en la localidad de Gualaca.
Por otra parte, el 7 de este mes fueron hallados cinco cuerpos de migrantes guatemaltecos en un canal de riego del municipio de Pesquería, Nuevo León. Los restos, junto con los de nueve personas más fueron localizados dentro de una camioneta. En ese momento diversas organizaciones señalaron que este tipo de tragedias no son “accidentes viales”, ya que ante la falta de documentos y protección, las personas “recurren a rutas cada vez más peligrosas o bien a polleros que los trasladan sin condiciones de seguridad”.
Además, la Fundación para la Justicia, Sin Fronteras IAP y el Instituto para las Mujeres en la Migración, entre otras, recordaron que el 9 de diciembre de 2021, 56 personas perdieron la vida a raíz de la volcadura de un tráiler que los transportaba en el estado de Chiapas y a la fecha “no hay ni un responsable por ello”.