El Senado aprobó ayer la nueva Ley de Protección del Espacio Aéreo Mexicano, que otorga a la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) el control de dicha área, en medio de críticas de la oposición por lo que llamaron “la militarización” del sector y el planteamiento de Morena y sus aliados de que con esta norma se reparan lagunas legales en el marco jurídico vigente.
La petista Geovanna Bañuelos pidió no confundirse, pues con esta norma “no se militariza absolutamente nada, por lo contrario, se brinda certeza al regular las facultades del gobierno federal” sobre el espacio aéreo nacional y se da sustento jurídico a la participación de la Sedena en el ámbito de su competencia y de manera coordinada con otras dependencias, “para dar mayor seguridad a nuestros cielos”.
José Narro, de Morena, resaltó que existe un vacío legal en esta área, en medio del cual el Ejército ha realizado una heroica defensa de la soberanía nacional. Agregó que los gobiernos anteriores dejaron crecer grandes negocios ilegales que encontraron en la falta de legislación el espacio para el libre trasiego de mercancías prohibidas, y uso de aviones chatarras o sin matrícula, entre otras actividades que ponen en riesgo la salud, la seguridad y la soberanía nacional.
Eli César Cervantes, también de Morena, apuntó que el alcance de las leyes de Aviación Civil y de Aeropuertos ha resultado insuficiente, toda vez que han sido superadas por la realidad. Por ello resulta indispensable adecuar la gestión del sector.
De la oposición, el panista Juan Antonio Martín del Campo lamentó que no se haya realizado un parlamento abierto para escuchar a los expertos en el tema y criticó que se traslade a las fuerzas armadas una función más. Durante este sexenio se le han otorgado más de 200 tareas civiles, desde la construcción de obras, la distribución de vacunas y el control de la migración, detalló. Las fuerzas armadas no pueden ejercer más funciones de los que dicta la Carta Magna en el artículo 129.
Expresó que en su partido están a favor de proteger y salvaguardar la soberanía nacional con una norma que garantice la seguridad del espacio aéreo y contrarreste los vuelos ilícitos. Pero “nos preocupa una excesiva militarización”, ya que puede tener efectos negativos en la aviación comercial y de carga.
El emecista Marco Gama manifestó respeto por el trabajo que realizan las fuerzas armadas, pero en este afán de encomendarle prácticamente todo, ahora se le asigna la vigilancia y protección del espacio aéreo sin un análisis minucioso de su capacidad de asumir esa tarea y sin preocuparse del marco legal y presupuestal para ello.
La nueva ley fue aprobada en lo general por 63 votos a favor de Morena y sus aliados, 40 en contra de la oposición y cinco abstenciones de perredistas y priístas. En lo particular, la votación fue de 62 a favor y 43 en contra.