Ámsterdam. Bill Gates compró a FEMSA una participación de 3.76 por ciento en el gigante neerlandés de las bebidas Heineken Holding, si bien el multimillonario fundador de Microsoft dijo anteriormente que “no es un gran bebedor de cerveza”.

El registro de la Autoridad de los Mercados Financieros de Países Bajos (AFM) indica que las acciones se compraron el 17 de febrero.

Según un comunicado, FEMSA vendió 18 millones de acciones que poseía de Heineken Holding y Gates compró 10.8 millones de acciones, por valor de 883 millones de euros (939.87 millones de dólares) a los precios de mercado actuales.

Bajo las reglas del mercado de valores de Países Bajos, se desencadenó un requisito de divulgación.

Del total de acciones adquiridas, 6.65 millones se compraron a título personal por Bill Gates, mientras que las otras 4.18 millones de acciones fueron obtenidas a través del fideicomiso de la Fundación Bill & Melinda Gates.

Además, según Bloomberg, la Fundación Bill y Melinda Gates también invirtió en la tienda neerlandesa de comestibles en línea Picnic y tiene una participación de 1.34 por ciento en el productor holandés de fertilizantes OCI.

El miércoles de la semana pasada FEMSA dijo que, en un plazo de entre dos a tres años, colocaría en el mercado sus acciones en Heineken, que equivalen a 14 por ciento de esa firma, y usaría los recursos para pagar parte de su deuda y financiar su crecimiento a futuro a través de mayores inversiones de capital.

Sin completar el retiro de Rusia

Por otra parte, la cervecera Heineken anunció que espera abandonar Rusia en 2023, tras ser acusada por una web de investigación holandesa de mantener sus operaciones allí pese a anunciar el año pasado que se retiraría tras la invasión de Ucrania.

La plataforma FollowTheMoney afirmó el martes que Heineken -la segunda mayor cervecera del mundo- está “rompiendo su promesa” al seguir invirtiendo en Rusia.

“Estamos trabajando duro para asegurar la transferencia de nuestra empresa en Rusia a un comprador fiable en circunstancias muy difíciles”, dijo Heineken en un comunicado el martes, afirmando que su objetivo era completar la venta de su negocio ruso “en la primera mitad de 2023”.