Tel Aviv. Decenas de miles de manifestantes volvieron a las calles de Israel el sábado por la noche para mostrar su oposición al plan de revisión del sistema judicial del país que el ministro de Justicia dijo estar decidido a llevar a cabo.
Las marchas han atraído a grandes multitudes semanalmente desde principios de enero, cuando el Gobierno del primer ministro Benjamin Netanyahu apuntó al Tribunal Supremo.
"Aquí estoy, con mi armadura y mi escudo, haciendo lo que puedo", dijo Daniel Guytsabary, de 28 años, en medio de una multitud que llenaba una calle de Tel Aviv. Iba vestido de caballero con capa y casco, y ondeaba una bandera israelí.
Otros manifestantes portaban una enorme réplica de la declaración de independencia de Israel.
Los manifestantes se oponen a la legislación que Netanyahu y sus aliados religiosos y de derecha esperan aprobar, que limitaría los poderes del Tribunal Supremo para fallar frente el legislativo y el ejecutivo, al tiempo que daría a los parlamentarios poderes decisivos en el nombramiento de jueces.
Los defensores de la reforma afirman que es necesario frenar la extralimitación del Tribunal Supremo en la esfera política. Los críticos dicen que el plan debilitará los tribunales, pondrá en peligro las libertades civiles y perjudicará la economía, así como los lazos con los aliados occidentales.
"Estoy decidido a completar la legislación", dijo el ministro de Justicia, Yariv Levin, en una entrevista con el Canal 13 el sábado. "No creo que sea correcto gestionar un país con amenazas y dictados por lo que se dice en las calles".