Berlín. Estados Unidos, Alemania, Francia, Italia y Reino Unido se opusieron “firmemente” a la decisión de Israel de legalizar nueve asentamientos en Cisjordania y de proyectar nuevas viviendas en los asentamientos existentes.
“Nos oponemos firmemente a estas acciones unilaterales que no hacen más que aumentar las tensiones entre israelíes y palestinos, perjudicando los esfuerzos para llegar a la solución negociada de los dos Estados”, escribieron los jefes de la diplomacia de los cinco países, en una declaración conjunta.
Las medidas anunciadas el domingo por el gabinete de Seguridad de Israel se presentaron como una respuesta a una serie de ataques palestinos en Jerusalén Este, uno de los cuales causó tres muertos el viernes.
Los nueve asentamientos en cuestión eran hasta entonces ilegales en virtud del derecho israelí, ya que se establecieron sin la aprobación del gobierno, mientras para la Organización de Naciones Unidas toda la empresa de asentamientos judíos en Cisjordania es ilegal en virtud del derecho internacional.
“Profundamente preocupados” por el anuncio de Israel, Estados Unidos y los cuatro países europeos recuerdan en su comunicado que “una paz global, justa y duradera en el Cercano Oriente debe lograrse mediante negociaciones directas entre las partes”.
“Seguimos de cerca los acontecimientos sobre el terreno que afectan a la viabilidad de la solución biestatal y a la estabilidad de la región en su conjunto”, señalaron.
Israel ocupa Cisjordania desde la guerra árabe-israelí de junio de 1967. Más de 475 mil israelíes residen en asentamientos en Cisjordania (fuera de Jerusalén Oriental), donde viven 2.8 millones de palestinos.
En tanto, un palestino de 17 años murió por disparos de las fuerzas de Defensa de Israel en el campo de refugiados de Faraa, cerca de Nablus, en Cisjordania, informó ayer el Ministerio de Salud palestino. El ejército israelí afirmó que sus tropas abrieron fuego luego de que el sospechoso se les acercó con explosivos.