Como metáfora visual, utilizar el episodio conocido como “El abrazo de Acatempan” para resumir el pacto que selló el perdón de la Junta de Coordinación Política a Santiago Creel Miranda “es muy desafortunado e ingrato” por parte del panista, evaluó el presidente de la Comisión de Cultura de la Cámara de Diputados, Carlos Ortiz Tejeda (Morena).
“No es un acto fallido de Creel, está en su mente. En la farsa del jueves, él se asumió como (Agustín de) Iturbide, varias veces un traidorzuelo”, afirmó en entrevista.
Ese día, en conferencia de prensa conjunta, Creel y el líder de Morena, Ignacio Mier, informaron que los coordinadores habían decidido privilegiar la política y desechar las solicitudes de remoción del presidente de la mesa directiva por negociar la entrada de militares armados al recinto el primero de febrero.
Creel y Mier se abrazaron, lo que dio pie a la expresión del panista de “el abrazo de Acatempan legislativo”.
Al respecto, Ortiz Tejeda citó que la historiadora Patricia Galeana duda de que el encuentro entre Iturbide y Vicente Guerrero haya ocurrido, porque –agregó– el jefe de la insurgencia “le tenía desconfianza, y con razón, al comandante de las fuerzas realistas”.
Señaló que, según Galeana, Guerrero no acudió al encuentro, sino que envió a un subordinado. Más allá de este punto, “sólo un ignorante, que desconoce totalmente la historia de México, puede sacar a relucir el famoso abrazo, que la historia ha hecho relucir como un episodio donde se conjuntaron fuerzas”.
Sin embargo, “el verdadero sustrato de ese gesto es la traición. Creel escoge su rol, él es el traidorzuelo imperialista, él se lo adjudicó. Una total burla histórica”.
Recordó que una de las máximas de Alfonso Reyes fue que quienes no conocen la historia de México son extranjeros en su propia patria. “Me encantaría que Creel fuera el candidato presidencial del PAN, es ignorante, absolutamente ridículo, sobreactuado, es posible que sepa mucho de derecho mercantil y bancario, pero no de historia de México”.
En la sesión del 2 de febrero, Ortiz Tejeda expresó –en medio de los reclamos de Morena y PT a Creel– que no debería solicitarse la remoción del panista, para no victimizarlo.
Para el presidente de la Comisión de Cultura, el panista “se aprovecha de que su partido, que tampoco tiene mucho de dónde escoger, lo colocó como presidente de la cámara porque fue secretario de Gobernación, pero es endeble. Acato el acuerdo y que siga en el cargo, pero lo estaremos vigilando”.