Comerciantes del Centro Histórico se plantaron en el cruce de Doctor Río de la Loza y Digna Ochoa para exigir a las autoridades se les garantice trabajar “sin pagar por derecho de piso”.
Vendedores de Palma, Venustiano Carranza y Tacuba dijeron que la protesta es una medida urgente para presionar a que se investigue “qué sucede, quién se está apropiando de las calles y por qué debemos pagar para que nos dejen trabajar”.
Expusieron que son víctimas de extorsión, por lo que decidieron acudir a la Fiscalía General de Justicia a denunciar que personas que llegan con el rostro cubierto les piden 500 pesos a la semana para dejarlos vender.
Con pancartas, los comerciantes –en su mayoría mujeres– exigieron protección y se quedaron frente al edificio de la dependencia por dos horas “porque los cobros ya llevan varios meses y se han visto obligados a pagar ante el temor de que esa gente cumpla sus amenazas”.
Las afectadas evitaron mostrar su rostro y usaron sudaderas oscuras con capucha para no ser reconocidas por temor a alguna represalia.
Además de presentar la denuncia para que se detengan a los extorsionadores –jóvenes, que acuden a los puestos a cobrar–, dijeron que se les ha pedido un pago de 5 mil pesos de entrada con la finalidad de que nos les pase nada y 500 semanales para que vendan sin problemas y estén seguros.
A pesar de no estar de acuerdo con los cobros, algunas afectadas manifestaron que han cubierto la cuota porque conocen de experiencias en otras zonas de la ciudad donde han incendiado y disparado contra los negocios.
En casos más graves han levantado a los dueños y pese a las denuncias los hechos quedaron como incidentes delictivos sin investigación que impidan acabar con el cobro de piso.