La Ciudad de México alberga al día a unos 20 mil turistas denominados “nómadas digitales” en las colonias Roma, Condesa, Centro, Cuauhtémoc, Polanco y Anzures, así como en la Zona Rosa y Coyoacán, expuso el presidente de la Asociación Mexicana de Hoteles y Moteles (AMHM) en la capital, Rafael García.
El directivo alertó que hay una disponibilidad de 55 mil habitaciones reguladas, mientras la oferta que el usuario puede encontrar en aplicaciones como Airbnb, particularmente, es de 25 mil cuartos en casas, departamentos o edificios, incluso completos, de hospedaje, a los que calificó de “informales” al no cumplir con al menos 11 leyes y reglamentos, entre ellos el de uso de suelo.
En entrevista expresó que coincide 100 por ciento con el presidente Andrés Manuel López Obrador acerca de que la presencia de los nómadas digitales, personas provenientes de diferente países que permanecen en la capital por temporadas y hacen uso de tecnologías para trabajar a distancia, ha encarecido y modificado la vida de los colonos, al incrementarse las rentas mensuales, que han pasado, por ejemplo en la colonia Roma, de 12 mil hasta más de 30 mil pesos.
Dijo que los nómadas digitales provienen de Estados Unidos, Canadá, Argentina, Perú, Brasil, Colombia, Alemania, España y Francia, “países que tienen posibilidades económicas, pero México es más barato y les cuesta menos vivir aquí que en su país de origen”.
Indicó que la oferta de las aplicaciones de hospedaje está creciendo, por lo que la competencia “ya es dos a uno”, que definió de desleal porque a la AMHM “nos hacen cumplir con un exceso de normas y las aplicaciones sólo necesitan media hora para dar de alta su departamento, casa o edificio para hospedaje”.
Además de no cumplir con la normatividad, “por las noches los departamentos rentados por algunas horas se convierten “en bares, discotecas o se realizan fiestas y la tranquilidad de los vecinos se ve alterada”. Ello, aunado a que la zona se gentrifica y se pierde la esencia del barrio, porque ya no se conoce al vecino.
Ante esa situación, apremió al Congreso de la Ciudad de México a legislar en la materia, porque “va a llegar el momento en que va a haber más cuartos de este tipo que cuartos de hotel, que sí cumplen con los requerimientos fiscales y de seguridad social para los trabajadores, así como de protección civil y seguridad para los huéspedes.
Los nómadas digitales “son bienvenidos; qué bueno que vengan a dejar dinero, pero debe existir una normatividad para bien de los usuarios y los colonos”, porque la oferta está creciendo ante el aumento de la demanda, particularmente en los corredores turísticos, que junto con sus “alrededores se han encarecido tremendamente”.