Ciudad Juárez, Chih., Ejidatarios y campesinos de bajos recursos libran una lucha contra terratenientes que han perforado y explotado pozos ilegalmente para la producción agrícola, entre ellos miembros de la comunidades menonita y mormona, así como productores de nuez.
Según los investigadores Víctor Quintana y Martín Solís, activistas que apoyan a organizaciones de labriegos desde hace más de 15 años, “actualmente existen 2 mil pozos que operan sin permisos” y 5 mil más en lo que se llamó “zona de libre alumbramiento”, donde está prohibido perforar desde 2013 por un decreto del entonces presidente Enrique Peña Nieto.
Mario Mata, presidente de la Junta Central de Agua y Saneamiento (JCAS), dijo a su vez que en la entidad hay unos 16 mil pozos irregulares para extraer agua de uso agrícola, cantidad similar a los que están en el Registro Público de Derechos de Agua (REPDA).
Quintana afirmó que “en lo que se refiere a pozos de riego agrícola, el volumen del líquido es más del doble del volumen concesionado de agua del subsuelo para agricultura, que es de 2 mil 750 hectómetros cúbicos anuales”.
Sostuvo que en la entidad “existe una sobrextracción o sobreconcesión de aguas subterráneas; además, están los llamados pozos piratas, sin concesión o que usan las de otros acuíferos”, y a pesar de estas anomalías la Comisión Federal de Electricidad (CFE) “los conecta al suministro de energía”.
Explotación sin permisos
No obstante que los acuíferos subterráneos están en veda desde 1957, la comunidad mormona de los LeBarón perforó ilícitamente 10 pozos en el rancho La Mojina, municipio de San Buenaventura, para sembrar nogales, lo que ocasionó protestas de sus vecinos, los habitantes del ejido Constitución.
Los LeBarón, que siembran nogales en zonas desérticas aunque esos árboles requieren de grandes volúmenes de agua, aseguran que sus veneros son legítimos.
Según ellos, en 2014 obtuvieron permisos de la Comisión Nacional del Agua (Conagua), pero ese mismo organismo y miembros de la organización campesina El Barzón confirmaron que nueve de los 10 pozos de La Mojina son irregulares, pese a lo cual no se ha procedido contra los responsables.
El Barzón expuso que sólo en el municipio de Villa Ahumada, los LeBarón tienen alrededor de 300 pozos de agua fuera de la ley, en grandes extensiones que van desde el poblado Samalayuca, en Ciudad Juárez, hasta el municipio de Villa Ahumada.
Autorizaciones autoconferidas
En febrero de 2013, Alex LeBarón fue designado por Enrique Peña Nieto delegado de Conagua en el estado de Chihuahua, cargo que ocupó hasta 2015.
El entonces diputado priísta Omar Bazán presentó una iniciativa para modificar el Código Penal de la entidad a fin de reducir la perforación de pozos clandestinos.
En su momento, explicó que la CFE tiene 22 mil veneros registrados en Chihuahua –de los cuales por lo menos 6 mil son irregulares, y 12 mil que se perforaron en los pasados 10 años sin autorización–, que afectan las reservas de agua debido a los altos volúmenes de extracción.
Peña Nieto publicó en 2013 ocho decretos para prohibir el denominado libre alumbramiento de aguas nacionales en 333 acuíferos, con lo cual quedó prohibido hacer perforaciones en zonas donde hasta entonces fue posible hacerlo sin necesidad de contar con una concesión federal.
En esos mismos dictámenes se ordenó que la Conagua ya no entregaría títulos de concesión para aprovechamiento de agua en esas regiones, hasta que se contara con un “instrumento jurídico”, un reglamento que permitiera administrar y usar el líquido de manera sustentable.
Durante la gestión de Alex LeBarón como delegado de la Conagua, entre 2013 y 2014, se entregaron en Chihuahua 2 mil 140 constancias de autorizaciones de uso de agua subterránea en territorio estatal, se acotó en el REPDA. De 2015 a 2018 se registraron otras 2 mil 194.
El presidente de la JCAS, Mario Mata, explicó que para 2022 se habían hecho de manera ilegal 16 mil pozos en el estado, los cuales no cuentan con medidores para determinar la cantidad de agua que se obtiene de ellos.
Los municipios chihuahuenses con más pozos irregulares son Cuauhtémoc, Janos y Ascensión, y poblados cercanos a Juárez, como Villa Ahumada.