Las exportaciones mexicanas de productos cárnicos cerraron 2022 con caídas tanto en valor como en en volumen, esto pese a los altos precios internacionales del cerdo y el pollo por mayor consumo y menor producción, revelaron datos del Grupo Consultor de Mercados Agrícolas (GCMA).
Según cifras del organismo privado, con base en información de la Agencia Nacional de Aduanas de México, el año pasado nuestro país vendió a otras naciones un total de 569.7 mil toneladas de carne, una disminución de 2.7 por ciento respecto a los 585.8 mil toneladas registrados en 2021.
Dichas exportaciones del año pasado representaron un valor de 3 mil 180 millones de dólares, cantidad que quedó por debajo de los 3 mil 325 millones de dólares del año previo.
En cuanto a la carne de res, se registró un récord en exportaciones con cerca de 335 mil toneladas, mayor en 5.2 por ciento respecto al 2021, pero como consecuencia de una baja de 7 por ciento en el precio internacional, el valor de las ventas disminuyó 2.2 por ciento.
En tanto, a consecuencia de un desplome de 62.4 por ciento en las exportaciones hacia China, las ventas al exterior de carne de cerdo se redujeron 11.9 por ciento.
Pese a que el precio internacional del kilogramo se incrementó en 3.4 por ciento, el valor de las exportaciones mexicanas descendió 8.9 por ciento.
México aumenta importaciones
De acuerdo con las cifras del grupo consultor las importaciones de cárnicos de México aumentaron en 2022 frente al año previo, tanto en volumen como en valor.
En lo que se refiere a volumen, el año pasado México compró a otras naciones, principalmente a Estados Unidos, 2 millones 500 mil toneladas, un aumento de 4 por ciento respecto a las 2 millones 415 mil toneladas reportadas en 2021.
Para las importaciones de carne de 2022, México desembolsó un total de 5 mil 414 millones de dólares, un incremento de 13.8 por ciento en comparación con los 4 mil 759 millones de dólares registrados el año anterior.
De esta forma, el déficit en la balanza comercial de carne (res, cerdo y pollo) fue de 2 mil 233.5 millones de dólares. Esa cifra es consecuencia de que México no es autosuficiente, es decir, la carne que produce no alcanza a cubrir la demanda de toda su población, por lo que es necesario importar productos de otras naciones.