Kiev. Las fuerzas rusas reivindicaron ayer sus mayores avances en meses en el este de Ucrania, tras una oleada de ataques que, según Kiev, demuestran que Moscú no tiene en cuenta la vida de sus propios hombres.
El administrador de las zonas controladas por Rusia de la provincia de Donietsk, Denis Pushilin, refirió que las tropas aseguraron un punto de apoyo en Vuhledar, una ciudad minera de carbón cuyas ruinas han sido un bastión ucranio desde el comienzo de la guerra.
“Nuestras unidades (...) han establecido posiciones en la parte oriental de Vuhledar y también se está trabajando en las inmediaciones”, declaró Pushilin, citado por las agencias rusas. Una declaración que fue reproducida más tarde por el Ministerio de Defensa ruso.
Un día antes, el jefe de la fuerza mercenaria rusa Wagner aseguró que sus combatientes capturaron Blahodatne, un pueblo al norte de Bakhmut, una ciudad que ha sido el foco de ataques rusos sostenidos durante meses.
Sin embargo Kiev aseguró que repelió los asaltos a Blahodatne y Vuhledar, y la agencia de noticias Reuters no pudo verificar de forma independiente la situación en esos lugares. No obstante, las localizaciones de los combates notificados indicaban claros, aunque graduales, avances rusos tras unos dos meses en los que las líneas del frente habían permanecido, en gran medida, inalteradas.
“La situación es muy dura. Bakhmut, Vuhledar y otros sectores de la región de Donietsk sufren constantes ataques rusos”, indicó antier el presidente, Volodymir Zelensky, en un discurso por video.
Las tropas ucranias refirieron la semana pasada que se habían retirado de forma ordenada de Soledar, a unos pocos kilómetros de Bajmut, ante la presión de Wagner, que se cree cuenta con un gran número de convictos entre sus filas.
Vuhledar se encuentra al sur de Bakhmut, cerca de donde la línea del frente oriental protege las líneas ferroviarias controladas por Rusia que abastecen a las fuerzas de Moscú en el sur de Ucrania. Mykola Salamakha, coronel ucranio y analista militar, declaró a la Radio NV ucrania que el asalto de Moscú en Vuhledar tenía un coste enorme.
“La ciudad está en una zona elevada y allí se ha creado un núcleo defensivo extremadamente fuerte”, señaló. “Esto es una repetición de la situación en Bakhmut: una oleada de tropas rusas aplastadas una tras otra por las fuerzas armadas ucranias”.
Los separatistas apoyados por el Kremlin controlan partes de Donietsk desde 2014. Moscú pretende ahora conquistar la totalidad de la región tras declararla parte de Rusia el año pasado.
En Járkov, la segunda ciudad más grande de Ucrania, proyec-tiles rusos mataron al menos a cinco personas e hirieron a 13, informó el gobernador regional, Oleg Syniyehubov.
Zelensky se reúne con la premier danesa
En tanto, Zelensky se reunió en Mykolaiv con la primera ministra danesa, Mette Frederiksen, en una visita inusual de un dirigente extranjero cerca del frente. La ciudad, donde se detuvo el avance ruso en el sur, había estado sometida a incesantes bombardeos hasta que Ucrania hizo retroceder la línea del frente en noviembre.