Jalisco. Este año han sido asesinados en Jalisco siete elementos de seguridad pública de los tres órdenes de gobierno, entre ellos dos efectivos de la Guardia Nacional, incluido el homicidio de un efectivo de esa corporación perpetrado la noche del domingo pasado en el municipio de Ojuelos, durante un enfrentamiento entre uniformados y civiles armados.
El asesinato de un guardia nacional originario de Guerrero ocurrió en la comunidad Los Arcos, delegación municipal de Ojuelos muy cercana a los límites con el estado de Zacatecas. Esa demarcación es de gran importancia estratégica para delincuentes, ya que limita con los estados de Aguascalientes, Guanajuato y San Luis Potosí, lo que implica un corredor interestatal que les permite incurrir en ilícitos y huir de una entidad a otra.
De acuerdo con la fiscalía jalisciense, personal de la Guardia Nacional –corporación que tiene un cuartel en Ojuelos— efectuaba un recorrido de vigilancia en coordinación con policías municipales y marcó el alto a tres camionetas para realizar una inspección, pero los ocupantes de los vehículos se negaron a la revisión, dispararon contra los agentes e intentaron huir. Entonces lesionaron de muerte a un oficial.
En respuesta, guardias nacionales hirieron y dieron muerte a dos gatilleros que portaban sendos rifles AK-47.
Se informó que dos policías municipales y otro de la Guardia Nacional resultaron con lesiones leves por rozones de bala o esquirlas, pero no se logró realizar detenciones pese al dispositivo de búsqueda que se implementó con apoyo del Ejército Mexicano y de la Policía del Estado, que sólo lograron dar con una camioneta Ford Lobo de modelo reciente, que al parecer abandonaron los agresores.
Apenas el domingo fue sepultado con honores el comandante de la Policía Investigadora de la Fiscalía del Estado, Marco Piñón Méndez, quien el 25 de enero pasado recibió un disparo en la cabeza cuando acudió a cumplimentar una orden de aprehensión en Guadalajara.
El gobernador Enrique Alfaro, cuestionado este lunes sobre la escalada de agresiones contra personal de seguridad pública, dijo que los ataques a policías y militares han ocurrido en el marco del combate a la delincuencia organizada, no debido a que haya aumentado la violencia en Jalisco.
“Cada operativo que hacemos, cada estrategia que se pone en marcha, cada punto que definimos como prioritario para reforzar la presencia, implica riesgos, implica que nuestras corporaciones se enfrenten a fenómenos delictivos que durante muchísimos años no se atendieron”, afirmó.