América Latina en su conjunto concentra alrededor de 60 por ciento de las reservas de litio del mundo, lo que significa que seis de cada 10 toneladas del llamado oro blanco debido a su importancia para la transición energética de la humanidad están bajo tierras latinoamericanas, de acuerdo con información oficial.
Según reportes del Servicio Geológico de Estados Unidos (USGS, por sus siglas en inglés), los recursos de litio identificados en todo el mundo ascienden a aproximadamente 89 millones de toneladas, de las cuales 52 millones 850 mil toneladas están ubicadas en yacimientos de países de América Latina.
Los países latinos con las mayores reservas de litio son Bolivia, Argentina y Chile, donde se encuentra el llamado “Triángulo del Litio”; sin embargo, en los años recientes se han incorporado México, Perú y Brasil, países que han descubierto importantes yacimientos en sus territorios.
De acuerdo con el USGS, Bolivia no sólo es el país de América Latina con las mayores reservas de litio, sino que con alrededor de 21 millones de toneladas encabeza la lista mundial. Pese a su riqueza, aún no es una potencia productora, al grado que hace unas semanas el gobierno firmó una alianza con la empresa China Contemporary Amperex Technology, la mayor fabricante y recicladora de baterías de litio, para la construcción de complejos industriales para la producción de carbonato de litio.
Derivado de la importancia del mineral, el año pasado el gobierno federal hizo una reforma a la Ley Minera para decretar que el litio sólo podrá ser explotado por el gobierno.
Acuerdo Alemania-Chile
En Santiago, el canciller alemán Olaf Scholz anunció una asociación de materias primas con Chile, con la que Berlín espera asegurar un mayor acceso a minerales críticos claves para la transición a una economía verde.
“Queremos ayudar a Chile en el camino hacia un sector minero sostenible”, dijo Scholz durante una gira por América del Sur.
Alemania, con su poderosa industria automotriz, está especialmente preocupada por obtener más litio, el metal ultraligero clave para fabricar baterías para vehículos eléctricos.
Con información de Reuters