La aerolínea regional británica Flybe cesó sus actividades el sábado por segunda vez en tres años, con la cancelación de todos sus vuelos y el despido de 276 trabajadores. Aconsejó a las personas que tenían previsto volar que no se desplazaran a los aeropuertos.
Un portavoz de los administradores de Interpath Advisory dijo que unos 75 mil clientes de Flybe tenían reservas futuras que ahora no se harían efectivas. Flybe, que operaba desde Belfast, Birmingham y Heathrow a todo el Reino Unido y a Amsterdam y Ginebra, ha entrado en suspensión de pagos, una forma de protección frente a los acreedores.