Ciudad de México. Chat GPT-3, una plataforma de inteligencia artificial capaz de escribir artículos que parecen hechos por un humano, consiguió en cinco días un millón de usuarios registrados, algo que a otras grandes firmas tecnológicas les llevó más de dos años.
Según un informe publicado por el portal australiano Financial Review, a Netflix le tomó 40 meses alcanzar esa cifra; a Twitter, 24 meses; a Facebook, 10, y a Instagram, tres meses.
Generative Pre-trained Transformer 3, mejor conocido como Chat GPT-3, es una plataforma de inteligencia artificial que redacta textos. Funciona con un algoritmo de 175 mil millones de parámetros que tienen la capacidad de descifrar cuál sería la siguiente palabra a utilizar por una persona a la hora de escribir.
La plataforma ha llamado la atención en días recientes debido a que resulta casi imposible de descifrar si un texto, artículo o ensayo estudiantil ha sido escrito por una persona o por medio de esta aplicación.
El fenómeno ha llegado a tal grado que, por ejemplo, una investigación realizada por un profesor de la Universidad de Pensilvania, Estados Unidos, reveló que Chat GPT-3 aprobó un examen final de una maestría en administración de negocios con una puntuación de B.
“La aplicación tiene una capacidad notable de aumentar algunas de las habilidades de los trabajadores, y específicamente de los empleados en los puestos que ocupan los graduados de la maestría, incluidos analistas, gerentes y consultores”, dijo Christian Terwiesch, autor de la investigación y profesor de la universidad.
¿Cómo funciona?
Chat GPT-3 fue inventado por la firma OpenAI. Su primera versión fue lanzada en 2018 y tenía 117 millones de parámetros. La segunda en 2019 y contaba con 1.5 mil millones y esta última entrega se lanzó a inicios de este 2023.
Funciona mediante un algoritmo de aprendizaje que se basa en probabilidades, es decir, puede descifrar cuál será la siguiente palabra que alguien utilizaría en una oración. Toma una parte del lenguaje del usuario y lo transforma; por ejemplo, el usuario escribe “tengo ganas de tomar…” y la plataforma descifra qué sería lo siguiente a escribir según el contexto.
También predice el comienzo de una oración o la longitud que debería tener un texto o una frase solicitada. Los algoritmos recibieron un total de 570 gigas de información de texto.
Para utilizarlo, el usuario solamente debe crear una sesión en su plataforma y, literalmente, solicitar a la aplicación que “escriba un texto sobre los dinosaurios”.
El fenómeno es tan grande que Microsoft ha anunciado que hará una tercera inversión a OpenAI para continuar con el desarrollo, mientras empresas como Buzzfeed analizan la posibilidad de dejar de contratar redactores y utilizar GPT-3 para escribir sus artículos.
Aunque la innovación impresiona, analistas y profesores o catedráticos dudan de los beneficios que ésta pueda tener, ya que sería difícil descifrar si un alumno o algún trabajador escribió y adquirió los conocimientos necesarios