Ciudad de México. Con el fin de exigir justicia y apoyo a la sociedad para encontrar a su hermano Antonio Verástegui González y su sobrino Antonio Jesús Verástegui Escobedo, desaparecidos el 24 de enero de 2009 en Parras de la Fuente, Coahuila, Jorge acudió a la llamada Glorieta de las y los Desaparecidos a colocar las fotografías de sus familiares en las vallas que rodean el Ahuehuete.
Lamentó que a 14 años de los hechos “la impunidad persista”, ya que no hay un solo detenido por el delito en el que participaron integrantes del grupo criminal Los Zetas, “junto con la policía municipal, apoyados por la policías estatal”.
Jorge señaló que si bien la familia Verástegui González logró identificar a algunos de los agresores y la información se proporcionó a la fiscalía de Coahuila, “lamentablemente no hicieron nada: dijeron que no tenían elementos suficientes”.
Acompañado de familiares de otras víctimas, indicó que esta forma de protestar en la ex glorieta de la Palma, colocando fotografías de personas desaparecidas, no sólo busca llamar la atención de la sociedad para que los ayude a encontrar a sus seres queridos, sino también para que “los funcionarios que pasan por Reforma vean su rostro y que su incapacidad y colusión con los criminales provoca que ellos sigan desaparecidos”.
Manifestó en entrevista que para su familia, estos 14 años de búsqueda y de lucha para tener acceso a la justicia “han sido un proceso de tortura, porque queda este sentimiento de incertidumbre, de no saber qué les pasó o qué les está pasando. No nos pueden dar una respuesta de algo que en su momento era muy sencillo de solucionar, pero por la colusión de las autoridades con Los Zetas no se logró hacer y nos dejan a nosotros en un estado de mucha desesperación”.