Familiares de Antonio Díaz Valencia, profesor y líder comunero de Aquila, así como de otras personas desaparecidas en Michoacán, marcharon ayer en Morelia para demandar avances en las investigaciones.
Keyvan Díaz Valencia, hijo del dirigente, visto por última vez el pasado 15 de enero junto con el abogado Ricardo Arturo Lagunes, afirmó durante la protesta que la Fiscalía General de la República atrajo el caso, independientemente del trabajo que realizan sus pares de Michoacán y Colima. La última participa en las labores de búsqueda porque la camioneta en que viajaban los ausentes fue localizada en el municipio de Tecomán.
“Mi padre es un luchador social y defensor de los derechos indígenas, y lo mismo podemos decir del defensor de derechos humanos que lo acompañaba (Ricardo Arturo Lagunes)”, apuntó Keyvan.
Negó que la delincuencia organizada acechara a su familiar o que éste tuviera diferencias con empresas, “porque mi papá no es una persona conflictiva y lo mismo decimos del abogado, aunque sabemos que los defensores de derechos humanos corren peligro en México”.
Agregó que el paro de labores en la mina Ternium-Las Encinas y el bloqueo en el puente Coahuayana –en la carretera costera que une a Colima y Michoacán– continúan para exigir que se intensifique la búsqueda de Díaz Valencia y Lagunes.
El gobernador Alfredo Ramírez indicó que las fiscalías colimense y michoacana continúan con el rastreo y el secretario de seguridad pública de Michoacán, José Alfredo Reyes, se trasladó a la región nahua para encabezar las operaciones.
Mientras, familiares y amigos de Ricardo Lagunes y de Díaz Valencia reiteraron en la Ciudad de México su exigencia de resultados.
Ana Lucía Lagunes, hermana de Ricardo, y Michel Cervantes, de la organización civil IDHEAS, instó al gobierno federal a que en las pesquisas se tome en cuenta el contexto político de los hechos, así como el trabajo que han realizado Ricardo y Antonio en defensa de los derechos humanos.
A su vez, comuneros del municipio de Aquila, presentes en el plantón del puente de Coahuayana, participaron vía telefónica en la conferencia de prensa y advirtieron: “No vamos a movernos hasta que aparezcan nuestros compañeros”.