Ciudad de México. Desde Querétaro, el estado de México y las alcaldías Gustavo A. Madero y Tlalpan la gente se volcó a la calzada flotante que une la primera y la segunda secciones del Bosque de Chapultepec, la cual recorrió a pie, en bicicleta o patines acompañados de la familia, la pareja, los amigos o sus mascotas.
Se trata de “un gran acierto” porque “facilita mucho la movilidad entre ambas secciones y puede pasar Periférico, una de las vialidades más difíciles de cruzar”, coincidieron en señalar entrevistados, entre ellos Emiliano, quien tardó dos horas en llegar en su bicicleta.
José y Samuel, quienes se trasladaron en transporte público, consideraron que “hacía mucha falta porque ir de una sección a otra implicaba mucho tiempo y hasta algún riesgo, y ahora vamos a ir rápido a pie disfrutando del paisaje”.
La calzada, construida por las autoridades locales y federales como parte del proyecto Chapultepec: naturaleza y cultura, atrajo la atención de la familia de Laura, que invirtió tres horas en llegar desde Querétaro, pero “valió muchísimo la pena”.
Dicha obra, con una longitud de 436 metros, que conecta la avenida de Los Compositores con Periférico y el Complejo Cultural Los Pinos, fue disfrutada ayer por cientos de personas, que desde temprano se dieron cita para conocerla y tomarse la foto del recuerdo.
La familia Álvarez consideró que se trata de una “obra de vanguardia” y aprovechó que el recorrido concluía en Los Pinos para visitarlo; otros disfrutaron de unos tacos de canasta, cuyos vendedores se apostaron al paso de la gente.
Unos más se dedicaron a “buscar” el Centro de Cultura Ambiental, pues la falta de información de su ubicación les “hizo dar vueltas”, y quienes lograron llegar “fue por pura suerte”, dijeron.
En lo que fue anteriormente uno de los estacionamientos del bosque se construyó dicho centro, que cuenta en su parte trasera con un espacio al aire libre con gradas de piedra y en el frente con huertos y dentro con diversas salas.
Un gran globo terráqueo recibe a los visitantes al centro y en las salas; la gente conoce la importancia de Chapultepec, un mapa de su extensión y los vestigios arqueológicos encontrados en la construcción de este espacio, además de abordar temas como el cambio climático.
Decenas de personas que acudieron a conocerlo se dijeron “encantadas con este gran concepto”, como fue el caso de Emilio, don Pedro, Jorge Ramírez y los integrantes de la familia Vázquez García, quienes propusieron que se cuente con un código QR para una visita virtual.