A pesar de que en el mundo uno de cada tres internautas son niños y adolescentes, existen pocos mecanismos de protección y salvaguarda de sus derechos, advierte el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (Unicef).
Entre los principales peligros se incluye el uso indebido de su información, acceso a contenidos perjudiciales, acoso cibernético e incluso juegos virales o “retos” que pueden poner en peligro la vida.
El Reporte OpiNNA: Navegación Segura, elaborado por la comisión sobre tecnologías de la información y contenidos audiovisuales, de la secretaria ejecutiva del Sistema Nacional de Protección Integral de Niñas, Niños y Adolescentes (Sipinna), alerta de que en el país al menos 7 por ciento de los menores han sido invitados a participar en juegos y retos virales violentos.
El sondeo, que busca conocer la opinión de niños y adolescentes de 10 a 17 años, destaca que los de 10 a 14 son los más vulnerables al riesgo de participar en retos virales, como el llamado “clonazepam”, difundido en TikTok, que dejó cinco alumnos de secundaria intoxicados en la Ciudad de México.
De acuerdo con los resultados difundidos en 2022, el equipo más utilizado entre menores es el celular, con 84 por ciento; suelen hacerlo por la tarde y antes de dormir.
En promedio, señala, se conectan a Internet entre seis y ocho horas diarias, principalmente para socializar, ver videos, hacer búsquedas en navegadores y practicar videojuegos en línea.
Las redes sociales favoritas son YouTube, TikTok, Whatsapp y Facebook, pese a que 22 por ciento de estos usuarios menores de edad señalaron incidencias que los pusieron en riesgo, entre ellas, ser seguidos en sus redes sociales por desconocidos (53 por ciento), dar a conocer con facilidad su identidad (nombre y foto), y haber sufrido algún tipo de agresión.
El Sipinna alerta de la necesidad de mantener la supervisión de los contenidos que niños y adolescentes ven en Internet, la información a que tienen acceso y quién los contacta.
En el caso de los retos virales, señala que se trata de un fenómeno extendido a nivel mundial. “La gran mayoría tiene como objetivo integrarse a diferentes grupos u organizaciones, lo que les da un sentido de pertenencia”.
Sin embargo, como parte de los retos, advierte, también pueden solicitar a los menores ir a un lugar específico “donde los tratantes aprovechan para llevar a cabo actos ilícitos o enviar el famoso pack, que es un grupo de fotografías donde la chica o el chico en cuestión enseñan sus cuerpos”.
A su vez, el Unicef señala que la presencia ubicua de dispositivos móviles hace que el acceso en línea para muchos niños “esté menos supervisado y sea potencialmente más peligroso”, por lo que llamó a impulsar acciones que garanticen la seguridad en Internet.