Washington. La Casa Blanca rechazó ayer las críticas por sus fragmentadas revelaciones sobre el descubrimiento de documentos confidenciales en la vivienda y la que fue oficina del presidente Joe Biden, y sostuvo que aún podría retener información a fin de proteger la investigación del Departamento de Justicia.
Ian Sams, vocero de la oficina legal de la Casa Blanca, declaró a reporteros que la presidencia está publicando información a medida que lo considera “apropiado”. En respuesta a críticas de que la información es difundida de manera gradual, Sams enfatizó: “estamos tratando de ser lo más transparente posible hacia la prensa y el público, pero con respeto a la integridad de una investigación del Departamento de Justicia que sigue abierta”.
El descubrimiento de los documentos en propiedades de Biden complica la pesquisa federal sobre el ex presidente Donald Trump, quien según el Departamento de Justicia se llevó miles de documentos clasificados a casa a principios de 2021 y durante meses resistió los pedidos del gobierno para devolverlos.
Si bien los casos son muy distintos –Biden, por ejemplo, inmediatamente devolvió los documentos una vez que fueron expuestos– el tema se ha convertido en un dolor de cabeza para el presidente que prometió más transparencia después de la administración de Trump.
El sábado, la Casa Blanca divulgó que abogados de Biden hallaron documentos clasificados y registros oficiales en cuatro ocasiones: el 2 de noviembre, en el Centro Penn Biden en Wa-shington; el 20 de diciembre, en el garaje de la casa de Biden en Wilmington, Delaware, y el 11 y el 12 de noviembre, en la biblioteca de la casa del presidente.