Roma. El Nápoles, con el mexicano Hirving Lozano, revalidó sus aspiraciones de ser campeón esta temporada en la Serie A, un objetivo que persigue desde hace tres décadas, después de arrollar 5-1 a la Juventus en la apertura de la fecha 18.
Aunque Lozano jugó apenas dos minutos luego de entrar de cambio, los napolitanos, que desde el pasado domingo tienen seguro cerrar en lo más alto la primera vuelta del torneo, ofrecieron un festival ofensivo ante un equipo que destaca por su defensa.
El nigeriano Victor Osimhen firmó un doblete (minuto 14 y 65) y los otros tantos locales fueron obra de Khvicha Kvaratshkhelia (39), Amir Rhahmani (55) y Eljif Elmas (72), mientras el argentino Ángel Di María anotó el único de los visitantes al 42.
Campeón del mundo en Qatar, Di María fue el mejor elemento de su equipo en el estadio que lleva el nombre de Diego Maradona, pero tras el descanso la superioridad de los locales fue evidente.
El cuadro napolitano suma 37 puntos, 10 más que la Juve y el Milán, sus más cercanos perseguidores en la tabla de posiciones.
Los rossoneros están ahora bajo presión de cara a su visita del sábado al Lecce, ante el cual intentarán recortar la diferencia a siete unidades.
Entre los goleadores, Osimhen llegó a 12 dianas y se escapó también como líder, ahora con cuatro de ventaja sobre el grupo de jugadores igualados en la segunda posición, empatados a ocho.
“Merecíamos esta victoria; estoy contento por el equipo y por mi contribución en el partido”, declaró Osimhen a DAZN.
A menos de la mitad de la liga, la cual consta de 38 fechas, el Nápoles pide cautela; no obstante la ciudad vive con la ilusión disparada el curso de esta temporada, soñando con un tercer Scudetto.