La invasión de Rusia a Ucrania a principios de 2022 detuvo la recuperación económica global tras las afectaciones de la pandemia, pues antes de ésta, los pronósticos de crecimiento económico de las diferentes regiones eran más alentadores que los actuales dados a conocer ayer por el Banco Mundial (BM).
En enero de 2022, en su reporte de Perspectivas Económicas Globales, el BM pronosticaba que la economía global crecería a un ritmo de 3.2 por ciento en 2023, muy por encima del 1.7 por ciento que ayer divulgó.
El pronóstico para las economías emergentes, de las cuales es parte México, era de 4.4 por ciento para este año, el cual fue recortado a 3.4 por ciento.
Por regiones, preveía un dinamismo de 5.2 por ciento para el este de Asia y el Pacífico, el cual fue bajado hasta 4.3 por ciento; para Europa y Asia Central anticipaba un crecimiento de 2.9 por ciento, que bajó a 0.1 por ciento (a raíz del desplome de Rusia).
Para Latinoamérica y el Caribe el pronóstico era de 2.7 por ciento, el cual fue bajado a 1.3 por ciento; en tanto, la excepción es Medio Oriente y África, donde el dinamismo previsto era de 3.4 por ciento, mismo que aumentó a 3.5 por ciento.
En tanto, para Estados Unidos anticipaba un dinamismo de 2.6 por ciento en 2023, mientras ahora sólo espera uno de 1.6 por ciento.