El gobierno de México extraditó a Canadá a Alyas Rahimi, acusado de operar en ese país para distribuir droga del Cártel de Sinaloa.
Rahimi fue detenido en abril de 2015 por la Real Policía Montada de Canadá durante la “Operación Harrington”, junto con otros 14 miembros de una supuesta red del cártel dirigido entonces por Joaquín El Chapo Guzmán.
El ahora extraditado fue vinculado a proceso por el delito de conspiración para importar cocaína, sin embargo, obtuvo su libertad condicional, lo que aprovechó para huir a nuestro país.
El 16 de octubre de 2017, y gracias a una alerta de Interpol, fue ubicado y detenido en la alcaldía de Iztapalapa, en la Ciudad de México, e internado en el Reclusorio Norte.
Su extradición se retrasó debido a que, en 2019, obtuvo un amparo luego de comprobar que no contó con un traductor durante su juicio, ya que, aunque es naturalizado canadiense, nació en Afganistán, y no tuvo asistencia en ese idioma.
Una vez repuesto el procedimiento, un juez autorizó su extradición, la fue cumplimentada por la Fiscalía General de la República en el aeropuerto internacional de la Ciudad de México.