La captura de Ovidio Guzmán, El Ratón, uno de los principales líderes del cártel de Sinaloa, dejó un saldo de 29 fallecidos –19 presuntos delincuentes y diez elementos de las fuerzas armadas—, 35 lesionados y 21 detenidos.

Así lo informó el titular de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), Luis Cresencio Sandoval durante la conferencia matutina del presidente Andrés Manuel López Obrador, donde hizo un nuevo recuento de la jornada de ayer en Culiacán, Sinaloa y otros sitios de ese estado para aprehender al hijo de Joaquín El Chapo Guzmán.

Destacó que no hay víctimas civiles hasta ahora pese a las acciones que como respuesta a la captura emprendieron integrantes de la organización delictiva, entre agresiones armadas a distintos objetivos, bloqueos de vías de comunicación y quema de automóviles.

El secretario destacó la labor de los elementos que perecieron en estas acciones. “Diez militares, haciendo énfasis en sus valores como soldados de la patria, lamentablemente perdieron la vida en el cumplimiento de su deber, en aras de garantizar la seguridad de la ciudadanía y del pueblo sinaloense. El Estado mexicano brindará todo el apoyo a los deudos”.

Los 35 lesionados por arma de fuego, agregó, son militares, a quienes se les brinda la atención médica en distintos hospitales.

Como parte de las acciones contra este grupo delincuencial, las fuerzas armadas lograron decomisar cuatro fusiles Barrett calibre 50, seis ametralladoras también calibre 50, 26 armas largas y dos cortas, cargadores, 595 cartuchos de diferentes calibres, dos chalecos antibalas, 13 vehículos, 40 camionetas inutilizadas (26 de éstas blindadas), 1.4 kilogramos mariguana, 150 gramos de cocaína y seis bolsas con pastillas de fentanilo.

“Después del evento, para reactivar el orden y el estado de derecho, se desplegaron en el estado de Sinaloa 3 mil 500 efectivos del Ejército y de la Guardia Nacional, entre los cuales se encuentra personal de fuerzas especiales y fusileros paracaidistas”, apuntó el general secretario.