Ciudad de México. Puntual, a las 3:00 de la tarde se abrió el acceso a la plancha del Zócalo capitalino y enseguida cientos de personas que permanecían formadas alrededor de las vallas metálicas que rodean la plancha se apresuraron a hacer fila en alguno de los cuatro módulos que el gobierno de la ciudad instaló para el reparto de rosca de reyes y con el que cierra las actividades por las festividades decembrinas y de año nuevo.
Los juegos mecánicos, en su último día, funcionarán hasta las 20:00 horas y en el transcurso de la tarde amenizarán en el escenario tres elencos: Pepe Frank, que inició su presentación a las 16:00 horas, le seguirá la Big Band del Instituto de la Juventud, para cerrar con Mariana Mallol.
Se entregaron además 5 mil juguetes que fueron donados por mas de 30 organizaciones de comerciantes de la ciudad y se instaron tre espacios para romper piñatas a donde los menores pasaban en bloques de 20.
Pilar, de 10 años, y su hermano José Luis, de 7, se olvidaron de la rosca al ver una de las piñatas que ya colgaban de arcos metálicos, fue ella quien la rompió en su turno para pegarle y tubo la suerte de agarrar una pelota premiada con una bicicleta, igual que su hermano, quien se llevó un monopatín.
Ivonne González, tuvo que llevarlos a su trabajo, enviudó hace tres años y no tenía hoy con quien dejarlos, al salir de sus labores en servicios de limpieza, les propuso ir al Zócalo y ahora se llevará a su casa en la colonia Capultitlan, en Gustavo A. Madero, regalos adicionales al juego de uñas y el carrito de control remoto que les trajeron los reyes a sus niños.