La Paz. El presidente del Tribunal Supremo de Justicia, Ricardo Torres Echalar, aseguró que, tras la detención del gobernador del departamento de Santa Cruz, Luis Fernando Camacho, “estamos viendo el interés propio, de una región, de un grupo, estamos reduciendo el interés de la patria al interés de unos cuantos, cuando el reto es construir patria”.
Durante esta jornada, movilizaciones en La Paz, Cochabamba, Tarija y Santa Cruz pidieron la liberación del gobernador cruceño sin que se reportaran incidentes. Diferentes iglesias organizaron una marcha que recorrió desde el centro cruceño hasta el Atrio Papal, en el Cristo Redentor. La policía se replegó a las calles aledañas, al Comando Departamental y erigió barricadas, indicó el periódico El Diario.
Camacho está en prisión preventiva desde el pasado 28 de diciembre y enfrenta cargos por “terrorismo” por su participación en el golpe de Estado de 2019 contra el entonces presidente Evo Morales y el apoyo a la instauración de un gobierno de facto.
Torres Echalar recordó la visita el año pasado del Grupo Interdisciplinario de Expertos Independientes de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos para elevar un informe sobre el golpe de Estado en 2019.
El subcomandante de la policía en Santa Cruz, Edson Claure, explicó que el saldo de las recientes protestas es de 26 policías heridos, 44 vehículos quemados de la Fiscalía e incendios en cerca de 20 instituciones entre públicas y privadas desde la semana pasada tras la detención de Camacho.
Los representantes cívicos resolvieron ayer mantener los bloqueos en Santa Cruz y masificar la medida de manera escalonada en diferentes regiones informó el portal Página Siete.
La Central Obrera Boliviana (COB), máxima entidad sindical del país, se declaró ayer en “emergencia” por los bloqueos. Su secretario ejecutivo, Juan Carlos Huarachi, consideró que las protestas pro Camacho se caracterizan por la violencia, la intimidación, el vandalismo y “el terrorismo”.
Vigilan la salud del líder opositor
Antier, el gobernador sufrió una “parálisis” en la prisión de Chonchocoro, en La Paz, y ayer las autoridades penitenciarias afirmaron que está bajo tratamiento y lo acompaña su esposa, Fátima Sánchez, quien se quedará con él tres días. Durante su recuperación, se permitirá que lo acompañe un familiar, indicó el director del penal, Juan Carlos Limpias.
El secretario de Salud de Santa Cruz, Edil Toledo, explicó que Camacho, de 43 años, padece hipogammaglobulinemia, una deficiencia de anticuerpos en la sangre, y síndrome de Churg-Strauss, que causa la inflamación de los vasos sanguíneos.
Horas antes, Sánchez y representantes de la gobernación de Santa Cruz acudieron al penal en medio de una vigilia de un grupo de indígenas aymaras denominados Ponchos Rojos, críticos a Camacho.
La cancillería de Bolivia elevó una queja diplomática contra un diputado chileno y otro español por incurrir en injerencia interna al ingresar al país para abogar por Camacho.
El diputado español del partido ultraderechista Vox, Víctor González, tuiteó que fue expulsado de Bolivia, y comentó que tampoco se le permite ingresar a Cuba y Nicaragua. Él y el legislador chileno Luis Fernando Sánchez, del Partido Republicano, fueron invitados por el Comité Cívico de Santa Cruz.
El ex ministro boliviano del gobierno de facto, Arturo Murillo, fue condenado a 70 meses de prisión por sobornos recibidos a cambio de ayudar a una empresa estadunidense a obtener un contrato, informó ayer el Departamento de Justicia de Estados Unidos.
Murillo, de 58 años, fue ministro de Gobernación de la administración de la autoproclamada presidenta derechista Jeanine Áñez, quien purga una condena de 10 años de prisión.