Ciudad de México. La paridad de género en la economía ha avanzado en los años recientes. Sin embargo, tanto en México como a nivel global, las mujeres aún se enfrentan a obstáculos para entrar, mantenerse y desarrollarse en el mercado laboral por diversos factores, como la flexibilidad de horarios, la brecha salarial, entre otros.
Un estudio del Instituto Mexicano para la Competitividad, apoyado por Bayer y el Consejo Coordinador Empresarial, entre otros organismos, indica que la desigualdad de la distribución entre hombres y mujeres en el mercado laboral se traduce en subrepresentación de las trabajadoras y concentración en empleos de bajos salarios.
Acceder a puestos directivos o de mayor responsabilidad en una empresa representa mayores barreras y menos posibilidades para lograrlo, por lo que son relegadas a puestos subordinados, según el análisis.
En México las mujeres representan el 52 por ciento de la población y aportan el 40 por ciento de la fuerza laboral. La brecha salarial se ha reducido en los últimos 17 años, pero no se ha nivelado. Por cada 100 pesos que un hombre ocupado recibe, una mujer obtiene 86 pesos, lo cual se traduce en una brecha de 14 por ciento, la cual en 2005 era de 21 por ciento.
Comparado con otros países, la brecha salarial de México es menor, pues está por debajo de Perú con 18.6 por ciento, Chile con 23.6 por ciento y frente a Estados Unidos con 23.5 por ciento.
De acuerdo con el Instituto Nacional de Estadística y Geografía, en el país el 2.6 por ciento de las mujeres ocupadas son empleadoras, dato que contrasta con el 6.5 por ciento de los hombres ocupados en esa misma condición.
Sin embargo, el sector privado en los últimos años ha buscado cambiar la brecha de género en el mercado laboral.
Bayer, por ejemplo, busca sumar las diferencias dentro de su personal para fomentar un entorno de trabajo diverso.
Cuenta con un Comité de Inclusión y Diversidad formado por integrantes de todas las áreas de la empresa para generar proyectos de inclusión.
Se ha propuesto equilibrar 50/50 el género para 2025. Actualmente el 37 por ciento de su población laboral son mujeres, pero a nivel de jerarquías el avance es mayor, pues 38 por ciento de las gerencias junior son ocupadas por mujeres, 41 por ciento de las posiciones gerenciales senior las ocupan mujeres y 37 por ciento de los puestos directivos también.
Ha implementado políticas que promuevan la igualdad de género, como evitar sesgos en la contratación de personal, flexibilidad de trabajo después del periodo de maternidad, la paternidad responsable, horarios de trabajo remoto, tolerancia cero a la violencia laboral, hostigamiento u otro tipo de acoso.
Adoptó los Principios para el Empoderamiento de las Mujeres (WEPs por sus siglas en inglés) de ONU Mujeres y el Pacto Mundial de las Naciones Unidas.
Hacia el exterior promueve programas de salud reproductiva para las mujeres de comunidades indígenas, con el fin de que tengan mayores oportunidades y a través de Great IDEA, en conjunto con WEConnect International, capacita y apoya a mujeres emprendedoras.