Doha. Con 37 años de edad, las piernas de Luka Modric no se cansan. El mediocampista y capitán de Croacia lanzó una advertencia para terminar con las especulaciones y dejar clara su intención de seguir con la selección tras conseguir el tercer puesto en la justa mundialista.
“Croacia tiene futuro y hay que seguir. Por lo menos quiero seguir hasta la Liga de Naciones (en verano próximo) y luego veremos”, sostuvo el jugador.
Modric es de los pocos profesionales que mantienen a su edad un buen rendimiento físico, lectura del juego y acierto en los pases. Sin embargo, es probable que Qatar haya sido su último Mundial.
El legado de Modric ya es histórico: fue la guía para que los balcánicos alcanzaran la final ante Francia en Rusia 2018 y ahora cumplió como líder para que subieran de nueva cuenta al podio.
“Se pudo ver en el campo cómo celebramos, significa mucho. Ganar dos medallas en dos Copas del Mundo es algo muy importante, muy grande para Croacia”, dijo a Gol Mundial.
“Estoy muy contento por mi trayectoria. Quería ganar, era mi sueño, pero hoy también estoy feliz.”
El director técnico Zlatko Dalic, confesó que el bronce en Qatar “tiene un brillo de oro”, al tiempo que confesó el “final de un ciclo” de una generación de destacados futbolistas, pero con jóvenes listos para el relevo.
“Tenemos muy buenos futbolistas que dan esperanza. Croacia no teme a este cambio de generación”, apuntó, antes de alabar el nivel mostrado por Josko Gvardiol.
Dalic, le dedicó la victoria a Ciro Blazevic, quien condujo a los croatas al bronce en Francia 1998. “¡Jefe, esto es para ti! Yo podría ganar cinco medallas, pero tú seguirías siendo el entrenador de entrenadores”.
Orgullo y alegría
El festejo llegó también hasta Zagreb, capital de Croacia, donde miles de personas vencieron al frío y se congregaron en la plaza Ban Jelacic para seguir el triunfo de su selección.
“¡Croacia arde! Lágrimas, canciones, orgullo y alegría en todo el país”, resumió el periódico Vecernji List en su página de Internet.