En un operativo que incluyó el despliegue de tropas helitransportadas, siete aviones y cuatro helicópteros, la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) y la Guardia Nacional (GN) interceptaron un avión con más de 469 kilogramos de cocaína.
El lunes pasado, el Sistema Integral de Vigilancia Aérea de la Sedena detectó la nave no identificada cuando ingresó al espacio aéreo nacional procedente de Centroamérica, sin un plan de vuelo autorizado.
Ante esto, se alertó a las Fuerzas de Reacción Helitransportadas y terrestres de los mandos territoriales del Ejército Mexicano; al mismo tiempo, se ordenó a la Fuerza Aérea Mexicana el despegue de dos aviones Embraer EMB-145, cuatro Texan T-6C y uno KA-350, así como dos helicópteros, uno UH-60 y otro EC-725; de igual manera, la GN envió dos helicópteros UH-60, todos ellos para rastrear a la nave sospechosa.
Mediante la búsqueda por radar y el seguimiento visual del avión intruso, se ubicó que aterrizó sin autorización en una pista del Aeropuerto Internacional Rafael Balbuena, de Mazatlán, Sinaloa, que en ese momento se encontraba fuera del horario de operaciones regulares.
Hasta ahí se dirigieron las fuerzas helitransportadas, que detuvieron a los dos tripulantes del aparato y aseguraron la nave, donde encontraron 10 paquetes cuadrangulares envueltos en plástico blanco, con la droga compactada.
La Sedena subrayó que este operativo fue posible gracias a los acuerdos establecidos en la Conferencia de Interoperabilidad Regional de Vigilancia y Seguridad del Espacio Aéreo entre los Países Latinoamericanos y del Caribe, el pasado día 5.
Los detenidos, la aeronave y la supuesta droga incautados fueron puestos a disposición de las autoridades competentes.
(Eduardo Murillo)