Monterrey, NL. Alfonso Martínez Muñoz, secretario del Medio Ambiente en Nuevo León, advirtió que además de ser un acto de crueldad animal, alimentar a los osos podría traer consecuencias legales para quien lo haga, toda vez que es un delito estipulado por la ley, así lo declaró al mostrar un video en el que una habitante del sur de Monterrey ofrece un postre a un ejemplar de plantígrado.
Al respecto, apuntó que “esta persona está expuesta a que alguien haga una denuncia y que se constate que es un daño para esta especie —que sí lo es—, y específicamente para este oso y entonces sufrir esa consecuencias”.
Por eso, ante el constante avistamiento de osos en las zonas boscosas que circundan la capital del estado, hizo un exhorto: “Por favor, no alimenten a la fauna silvestre, es dañino para ellos, no les estamos ayudando nada”, concluyó.
Reiteró que alimentar a los animales silvestres se pone en riesgo su existencia, que se agrava aún más por ser especies en peligro de extinción, como el oso negro.
Explicó que “cuando les damos nosotros de comer un postre o cualquier otro alimento elaborado, imagínense el oso asocia ese alimento, que jamás va a encontrar en la vida silvestre, con los humanos y el miedo que le tienen a los humanos, instintivo, lo pierden; se vuelven temerarios, audaces, pero también peligrosos.
“Los osos que están condicionados a que los alimentemos, en ocasiones buscando comida, pueden atacar a los seres humanos y cuando eso sucede, el que paga las consecuencias es finalmente el oso; entonces este acto de bondad realmente es un acto de crueldad animal, impensada, pero esa es la realidad de las cosas”, consideró Martínez Muñoz.
“Está tipificado en el Código Penal de la Federación, hay penas de cárcel a quien dañe especies en peligro de extinción y sobre todo si se cometen en áreas naturales protegidas”, ratificó.