Los Ángeles. ¿Documental o declaración de guerra? La monarquía británica aguarda con aprensión y hastío el estreno el jueves de una serie sobre Harry y Meghan, cuyos primeros extractos ya reavivaron rencillas entre los duques de Sussex y el resto de la familia real.
“Nadie conoce toda la historia. Nosotros conocemos toda la historia”, entona fríamente el príncipe en un tráiler divulgado por Netflix, en el que anuncia el estreno de la primera parte del documental, simplemente titulado Harry & Meghan.
Tres meses después de la muerte de Isabel II, la serie amenaza con arrojar una luz cruda sobre las divisiones en el seno de la familia real, que la pareja abandonó en 2020 alegando en parte el acoso de la prensa sensacionalista británica.
La boda entre el hijo menor del actual rey Carlos III y una actriz estadunidense mestiza fue vista entonces como un soplo de aire fresco para una monarquía envejecida. Pero después “todo cambió”, describe la pareja en el clip, que denuncia una “jerarquía en la familia” y “una guerra contra Meghan”.
También se oye a Harry denunciar las “filtraciones” y lamentar “el dolor y el sufrimiento de las mujeres que se casan con esta institución”, sobre imágenes de su madre, Diana, muerta en un accidente de coche en 1997 cuando era perseguida por los paparazzi. “No quería que la historia se repitiera”, afirma.
Contactado por la Afp, el Palacio de Buckingham no hizo comentarios, pero fuentes de la casa real citadas por el diario Daily Mail dijeron que Carlos III y la reina consorte Camila están ya “un poco hastiados” de los constantes ataques.
Otros advierten que las revelaciones podrían “ser peores de lo que la realeza espera”. “Va a ser explosivo”, dijo una fuente de Netflix al diario The Mirror.