Ciudad de México. Unas 300 personas se congregaron en la explanada de la alcaldía Tlalpan para observar el partido de la selección mexicana, entre ellas varias decenas de alumnos de la secundaria 29 “Don Miguel Hidalgo y Costilla” que de camino a casa al terminar su turno se detuvieron frente a la pantalla instalada por el gobierno de la demarcación.

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Hasta allí legó Javier Velázquez, técnico electricista, vecino de San Pedro Mártir, después de terminar un trabajo en Coyoacán.

Con su playera verde del seleccionado ocupó una de las alrededor de 150 sillas instaladas frente al monitor y apartó un lugar para un amigo, que fue el que lo persuadió para llegar allí a ver el juego “por el ambiente que se hace”, pero no llegó.

Contó que su afición por el futbol le viene desde niño, jugó en equipos durante unos 40 años, ahora tiene 62 y en algún momento quiso ser y en su juventud intentó “jugar para el profesionalismo pero no se armó, no hubo patrocinadores”.

En la pausa del medio tiempo del partido, muchos de los aficionados se retiraron, al menos un centenar permaneció en sus sillas, entre ellos Javier, que esperaba llegara su amigo para la segunda mitad y sobre todo los estudiantes continuaron su camino, aunque algunos regresaron después de encontrar en los alrededores alguna botana y bebidas azucaradas.

En tanto, mientras se desarrollaba el segundo tiempo del juego, espacios usualmente concurridos como plaza Perisur, pasillos y tiendas permanecían semivacías.

Santa no tenía menores que escuchar y la señora Claus, aprovechaba para reajustar el atuendo, pero algunos de los restaurantes lucían llenos, sobre todo los que tenían sintonizado el partido en sus pantallas.