Morena, el partido ahora con la mayoría en el gobierno, ganará las elecciones presidenciales de 2024 debido a una “frágil alianza de oposición” y a que se espera una reactivación del gasto público en programas sociales y proyectos prioritarios, estima el banco estadunidense JP Morgan.
“Las elecciones estatales fueron positivas para Morena, que ahora controla casi 70 por ciento de los estados de México. Desde nuestro punto de vista, el principal perdedor fue el PRI. Los próximos 12 meses serán claves para determinar la fuerza de la oposición y si es capaz de desafiar a Morena en 2024”, amplía en un reporte a inversionistas.
En él, la institución financiera consigna que el presidente Andrés Manuel López Obrador tiene una tasa de aprobación superior a 50 por ciento, “a pesar de una política de salud pública decepcionante durante la pandemia y la falta de incentivos fiscales en 2020 y 2021”.
En mayo reciente, Credit Suisse, una firma financiera suiza, reportó que tres de cada cuatro inversionistas nacionales e internacionales encuestados ya adelantaban que Morena ganaría los comicios presidenciales y esta percepción aumentaba a ocho de cada 10 al contar sólo a quienes se encontraban fuera del país (https://www.jornada.com.mx/2022/05/27/ economia/016n1eco).
Fuera del aspecto electoral, JP Morgan prevé que la economía mexicana crecerá 2.8 por ciento este año, para el próximo moderar su avance a 1.6 por ciento, en medio de restricciones por la política monetaria y una recesión en Estados Unidos durante el cuarto trimestre de 2023, que afectaría al sector manufacturero, por una baja en la demanda, y al consumo, que traerán un menor flujo de remesas.
“Si bien las remesas y el fuerte crecimiento de Estados Unidos han alimentado la demanda, el motor del lado de la oferta de la economía parece lastrado por las preocupaciones sobre la política energética y el retroceso institucional que desdibuja las reglas del camino”, indica.
Asimismo, el banco más grande de Estados Unidos reconoce que las tensiones geopolíticas en Asia y Europa tendrían que lleva a una relocalización de empresas hacia México, “cuya inmejorable ubicación geográfica y ventaja competitiva (por el renegociado T-MEC) son características claves”.
Considera que la inflación podría llegar a 8.4 por ciento al cierre de este año y a 5.1 por ciento el siguiente, pero advierte que las expectativas se han deteriorado “no sólo por la persistencia de la inflación real, sino también por las políticas gubernamentales que estimulan la demanda interna en medio de una limitada capacidad de crecimiento de la oferta”.
JP Morgan prevé que en este contexto el Banco de México llevará su tasa de interés a 10.75 por ciento, aunque la política monetaria en 10 por ciento ya se encuentra en territorio restrictivo. “Esperamos un aumento de 50 punto base en diciembre, seguido de un último de 25 puntos base en febrero”, detalla.
El banco considera que el ciclo al alza que lleva la Reserva Federal, el banco central de Estados Unidos, seguirá siendo una variable fundamental para las decisiones de la Junta de Gobierno del Banco de México, pero también hay “espacio para el desacoplamiento en términos de la magnitud de las alzas”.