Acapulco, Gro. Al oficializar el programa IMSS-Bienestar en este estado, el presidente Andrés Manuel López Obrador encomendó una tarea central al titular de la Secretaría de Salud (Ssa), Jorge Alcocer: tener un servicio de primera para brindar a los guerrerenses ese derecho, sobre todo porque la dependencia se mudó a este puerto desde hace ya algún tiempo.
“Aquí (en Guerrero) ya está la Secretaría de Salud, pero de qué sirve que se haya mudado a Acapulco si no hay médicos, no hay especialistas, no hay medicina ni sirven los equipos. ¡No! El doctor Alcocer es un hombre con principios y le quiero dejar la encomienda: no podemos tener aquí en Guerrero la Secretaría de Salud con servicio de salud de tercera, de cuarta; queremos tener servicios de salud de primera, como los mejores del mundo”.
Acompañado por los funcionarios del gabinete de salud; la gobernadora de la entidad, Evelyn Salgado; la presidenta municipal de Acapulco, Abelina López, entre otros, el mandatario federal señaló que en seis meses estará de regreso para verificar el avance del programa de la federalización de la salud, el llamado IMSS-Bienestar, que comenzó a operar en el estado apenas en noviembre.
Desde el hospital Renacimiento, ubicado en la colonia con el mismo nombre, López Obrador afirmó que su proyecto de salud fue ideado desde el inicio de su administración, inclusive visitó 80 hospitales del IMSS-Bienestar, pero se vio detenido debido a la crisis por la pandemia de Covid-19, lo que llevó a priorizar la atención en la emergencia.
Así, aprovechó esa evocación para reconocer a todo el personal de salud, médicos, enfermeras y enfermeros, anestesiólogos, camilleros y demás, “que arriesgaron su vida para salvar la vida de los demás. Nuestro reconocimiento. Tuvimos que enfrentar esa circunstancia difícil, dolorosa, nos aplicamos a fondo, trabajamos de manera conjunta y fuimos de los primeros países en comprar las vacunas, a penas se supo que se tenía la vacuna ya estaba en México y en cinco meses vacunamos con una primera dosis a todos los adultos mayores de nuestro país”.
El nuevo sistema de salud (que se aplica ya en nueve estados del país), dijo, ha comenzado a contratar a médicos y especialistas para brindar cobertura en todos los rincones del país y en cualquier día y horario, “porque la gente también se enferma en fin de semana”.
Y dejó un mensaje para quienes ya colaboran en el sistema de salubridad pero que aún no tienen el empleo fijo. “Que no les espante, no se va a despedir a nadie, al contrario se va a basificar a quienes no tienen permanencia en sus bases, es mi compromiso y vamos a garantizar el derecho a la salud: atención médica, medicamentos gratuitos, y nada que sólo el cuadro básico, todas las medicinas; todos los estudios; todas las intervenciones que se necesiten, y como ya lo vimos, no queremos caja registradora, porque la salud no es un privilegio, es un derecho de nuestro pueblo”.
Prometió retornar en seis meses para evaluar los avances del programa IMSS-Bienestar en Guerrero, “para poder decir: ‘ya tenemos todos los médicos, todos los especialistas al cien por ciento; el abasto de medicamentos, todos los equipos y ya está contratado todo el personal. En seis meses”. Y lanzó el reto a las decenas de personas reunidas en el acto: “¿Hacemos el compromiso?” Y al unísono vino la respuesta: “¡Siiiiiiii!”
En la ceremonia, se dio a conocer que el hospital Renacimiento cuenta ya con una unidad de hemodiálisis, para atender a todo aquel que lo requiera.
Así, el mandatario subrayó que la idea es no conformarse. “Me dio mucho gusto lo de la sala de hemodiálisis, es la primera y se está presumiendo, sí, pero no queremos una, queremos ocho cuando menos en seis meses. Porque, ¿qué va a pasar en la Sierra, en la Montaña, en la Tierra Caliente, en la Costa Chica, en la zona norte y en la Costa Grande. No, (contar con) una en cada región (ocho en el estado). Y además todos los equipos, los médicos, enfermeras, enfermeros, personal de salud y como ya lo dije, lograr entre todos dejar un sistema de salud de primera”.