Doha. Marruecos protagonizó una nueva sorpresa en el Mundial ante la envejecida Generación dorada de Bélgica. Con su victoria por 2-0, el combinado africano dejó a Kevin De Bruyne y demás semifinalistas de Rusia 2018 en peligro de ser eliminados en el Grupo F.
Tras ingresar de cambio en la segunda parte, el mediocampista de la Sampdoria, Abdelhamid Sabiri, abrió el marcador con un tiro libre que se coló por debajo del arquero belga Thibaut Courtois (73), considerado por muchos el mejor del mundo bajo los tres postes.
Más tarde, Zakaria Aboukhlal redondeó el resultado al rematar un centro de Hakim Ziyech en tiempo de descuento (90+2).
“Estamos fascinados tras enfrentar a Croacia (0-0) y Bélgica. Son resultados excepcionales”, manifestó el técnico marroquí Walid Regragui, luego de conseguir el primer triunfo de su país en el torneo desde 1998 y apenas el tercero en su historia.
“Los belgas son un equipo híbrido. Vinieron a presionarnos y nos metieron en problemas. Sabíamos que Courtois a veces se confía en el primer poste y que, por su altura, no podíamos buscar el segundo. El plan nos salió bien”, agregó.
Clasificados en segundo lugar en el ranking FIFA, los Diablos Rojos sólo registraban victorias en sus siete recientes encuentros de fase de grupos en la Copa.
“Todavía no hemos sido la mejor Bélgica en este Mundial”, admitió el español Roberto Martínez, seleccionador belga. “Hoy (ayer) pensé que jugamos con miedo a perder. Cuando tenemos la pelota no destacamos, no somos nosotros mismos. Debemos trabajar en eso y hacernos más fuertes”.
Aunque los europeos tenían posibilidades de lograr su pase anticipado a octavos de final, como lo hizo el sábado la vigente campeona Francia, la derrota los obliga a imponerse a Croacia, en su tercer y último partido de la fase de grupos, para seguir con vida en la competencia.
Un empate, combinado con el mismo resultado entre Marruecos y Canadá, los dejará fuera de la Copa.
“Hay muchas cosas que me pasan por la cabeza en este momento, las cuales no debería decir. No hemos creado ninguna ocasión. Probablemente atacamos mal, porque somos demasiado viejos”, concluyó con sarcasmo Martínez.
La derrota de los Diablos Rojos provocó disturbios en Bruselas, donde la policía detuvo a una docena de personas que incendiaron un coche y algunos patines eléctricos.
Los hechos se produjeron en varios puntos de la capital belga, con decenas de aficionados involucrados en enfrentamientos contra agentes antidisturbios.
“Los alborotadores utilizaron material pirotécnico, palos y prendieron fuego en la vía pública”, sostuvo la policía. “Además, un periodista resultó herido en la cara por los fuegos artificiales”.